La palabra ‘basura’ ha resonado en Estados Unidos a lo largo de la semana, especialmente desde que Donald Trump lanzó duras declaraciones sobre la inmigración. Aseguró que Estados Unidos se ha convertido en un ‘cubo de basura’ al que otros países envían a sus inmigrantes indeseables.

Trump afirmó: "Estamos recibiendo a lo peor de otros países, como Venezuela y el Congo. Desde el 5 de noviembre, iniciará la mayor deportación de nuestra historia. Fuera, fuera con ellos…". A pesar de sus afirmaciones, Trump, si gana las elecciones el próximo martes, no asumirá funciones hasta el 20 de enero.

Por otro lado, Joe Biden ha expresado su confusión al referirse a los seguidores de Trump, intentando enmendar sus propias palabras al afirmar que la única ‘basura’ a la que se refería eran aquellos que se mofan de Puerto Rico, y no los votantes en sí. Esto ha dado a Trump material para incentivar a sus seguidores, sosteniendo que el respeto por todos los estadounidenses es primordial.

La situación ha revelado una dinámica interesantísima en las elecciones, ya que se estima que más de 60 millones de estadounidenses han votado por adelantado y más del 55% de esos votantes en los estados clave son mujeres, apoyando en su mayoría a Kamala Harris por márgenes significativos.

Es crucial considerar que el voto es secreto, pero se especula que muchas mujeres, incluyendo a republicanas moderadas y conservadoras, podrían inclinarse por Harris. Esto se debe a su deseo de mantener control sobre sus decisiones reproductivas, así como su rechazo a la retórica misógina de Trump.

Trump, por su parte, busca atraer a las mujeres a su retórica. Afirma que protegerá a las mujeres de los criminales, aunque su enfoque ha sido criticado como paternalista y ofensivo. Las mujeres han vivido situaciones en las que han sido subestimadas o no han tenido el control sobre sus decisiones, lo que hace que este discurso resuene de una manera negativa.

Kamala Harris, por su parte, ha criticado abiertamente a Trump, considerando que no comprende las prioridades y los derechos de las mujeres. A esto se suma que muchas de las canciones que se tocan en los mítines de Trump están llenas de mensajes que refuerzan una visión patriarcal, como “It’s a Man’s Man’s Man’s World”, que irónicamente recuerda que este mundo no significaría nada sin las mujeres.

La narrativa de las elecciones de este año está marcada por la participación femenina y, si las mujeres se movilizan de manera efectiva, podrían transformar el panorama electoral y permitir que Harris haga historia como la primera ‘Madam President’ en la Casa Blanca.