Javi Giner, director y guionista, se ha definido a sí mismo como un payaso, arrogante y bocazas, pero detrás de esas etiquetas se esconde una profunda historia de lucha y redención. Giner ha vivido en carne propia el dolor de la adicción, enfrentándose a un destino oscuro que lo llevó a una cárcel sin compasión ni distinciones.

Su adicción fue un monstruo que lo arrastró a los infiernos, hasta que un día, después de contemplar su reflejo sobre un espejo manchado de cocaína, tomó la difícil decisión de elegir la vida por encima de la muerte. En su libro 'Yo, adicto', compartió su historia desgarradora de cómo tocó fondo y comenzó su camino hacia la recuperación.

Ahora, tres años después, la transformación de su viaje personal ha dado vida a una serie de seis episodios que ya está disponible en Disney+. La serie, escrita y dirigida por el mismo Giner, cuenta con Oriol Pla en el papel protagónico, interpretando a un Giner que, aunque es ficticio, encarna muchas realidades de quienes luchan contra la adicción.

Un Personaje que Muestra la Realidad de la Adicción

En entrevista para 'Más de uno', Giner comparte que al llevar su historia a la pantalla, ha creado una “multiplicación de almas”. Aunque su personaje refleja varias de sus vivencias, algunas de sus acciones son representaciones de la experiencia de otros adictos que ha conocido. "El Javier Giner de la pantalla es un conglomerado de muchos adictos y adictas", afirma, resaltando la importancia de dar voz a aquellos que permanecen en silencio.

Un Mensaje de Esperanza y Comprensión

Uno de los principales objetivos de Javi al escribir su libro y desarrollar la serie ha sido desestigmatizar la adicción y otros trastornos de salud mental asociados. A través de esta narrativa, busca mostrar que detrás de cada adicción hay una historia humana que merece ser contada y entendida.

Con el auge de la atención hacia la salud mental, series como 'Yo, adicto' ofrecen un espacio vital para la reflexión y la discusión. Giner espera que su obra resulte un faro de esperanza para aquellos que luchan en la oscuridad, recordándoles que siempre hay una salida, y que la vida puede ser elegida una y otra vez.