Isabel Montero, investigadora aeroespacial del CSIC, comparte su fascinante visión sobre los misterios del universo. «El espacio nos da un baño de humildad», dice con convicción, haciendo referencia a la insignificancia que el vasto cosmos puede hacernos sentir en comparación con nuestros problemas cotidianos.

La científica segoviana, nacida el 12 de mayo de 1955, ha dedicado su vida a explorar los confines del espacio. Colabora con la Agencia Espacial Europea para proteger satélites de radiaciones energéticas, tanto del sol como de rayos cósmicos, un trabajo crucial para el funcionamiento de las tecnologías que utilizamos diariamente. En su laboratorio del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Montero lidera investigaciones que permiten asegurar el buen funcionamiento de estos dispositivos en entornos hostiles.

La investigadora advierte sobre los peligros que enfrenta la Tierra: «Un cometa podría acabar con nosotros, pero podemos estar tranquilos, eso no lo vamos a ver», asegura, con un tono de sarcasmo que resalta la lejanía de tales eventos. Sin embargo, esto no minimiza la importancia de su trabajo, ya que la comunidad científica continúa preparándose para cualquier eventualidad.

Isabel Montero, con una larga trayectoria en el campo aeroespacial, ha trabajado en diversos proyectos que buscan nuevas tecnologías para la exploración espacial. Su trabajo no solo aporta a la ciencia, sino que también inspira a futuras generaciones a mirar más allá de nuestro planeta.

La convicción de Montero es clara: la ciencia no sólo es un campo de estudio, es una exploración continua de lo desconocido, un viaje que nos enseña no solo sobre el universo, sino también sobre nosotros mismos.