Leo Kryss, cofundador de la renombrada compañía brasileña de juguetes y electrónica Tectoy, se ha visto envuelto en una sorprendente controversia tras poner a la venta su ostentosa villa ubicada en la exclusiva isla de Indian Creek, Miami, por la asombrosa cifra de 85 millones de euros. Pero la trama se complica cuando el comprador solicita un descuento y resulta ser nada menos que Jeff Bezos, el fundador de Amazon.

La mansión, que cuenta con características dignas de un sueño, incluye siete amplios dormitorios, 14 lujosos baños, una bodega espectacular, una biblioteca impresionante, un cine privado y una piscina que sería la envidia de cualquier resort. Situada en una zona altamente protegida, la propiedad solo es accesible a través de un único puente controlado y está resguardada por una fuerza policial privada que garantiza la seguridad 24/7 tanto por tierra como por aire.

Kryss, convencido de que el precio de su mansión estaba justificadamente fijado debido a sus lujosos atributos, decidió venderla en mayo del año pasado. Sin embargo, después de un mes de interrogantes, la agencia inmobiliaria Douglas Elliman le presentó una oferta de solo 79 millones de euros.

Lo más inquietante fue el intenso sospechoso que acompañó a Kryss a lo largo de las negociaciones. Desde el inicio, él tenía la corazonada de que el interesado comprador no era otro que Jeff Bezos, quien poco tiempo atrás había adquirido la propiedad vecina por 68 millones de dólares. Al abordar este tema con el propietario de la inmobiliaria, Jay Parker, este afirmó que el segundo hombre más rico del mundo no estaba detrás de la transacción.

El desenlace fue impactante: Kryss accedió a vender la mansión por seis millones menos de lo que había pedido originalmente. Sin embargo, no fue sino hasta meses después cuando se dio cuenta de que sus sospechas eran efectivamente ciertas: fue Bezos quien compró la mansión, lo que llevó a Kryss a presentar una demanda contra la agencia de bienes raíces por no informarle adecuadamente sobre su comprador.

Este altercado no solo arroja luz sobre el intrigante mundo del lujo y las grandes transacciones inmobiliarias, sino que también resalta la potencial falta de transparencia en el sector. ¿Qué otros secretos se esconden detrás de las puertas de las mansiones más exclusivas del mundo? ¡Solo el tiempo lo dirá!