Introducción

El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha vuelto a poner en aprietos al Gobierno vasco al anular un decreto crucial del Departamento de Educación, dirigido por el PNV, por un error formal. Este decreto, aprobado en febrero por el consejero Jokin Bildarratza y su viceconsejera Begoña Pedrosa, establecía los criterios para la composición de grupos escolares en la educación pública y concertada, un paso considerado vital para combatir la segregación en las aulas.

Fallo del Tribunal

El tribunal detectó que el decreto carecía de la necesaria "Memoria Justificativa", un documento que debió presentar la necesidad y la oportunidad de su creación para asegurar la eficacia de la decisión. Este fallo ha levantado una olas de preocupación sobre la gestión educativa actual, ya que la normativa anulada debía desarrollar la controvertida Ley de Educación aprobada solo con los votos de PNV y PSE-EE, en medio de críticas por su contenido.

Recursos y Argumentos

Esta sentencia es el resultado de un recurso presentado por el sindicato Steilas y EHIGE, la asociación de madres y padres de la escuela pública vasca, que habían identificado hasta cinco defectos formales, así como tres más de fondo, cuestionando la validez del decreto. Sin embargo, el tribunal no entró a considerar estos argumentos de fondo, basándose meramente en el hecho de que faltaba la "Memoria Justificativa".

Señalamientos Internos

Lo que es aún más revelador, es que esta falta de justificación ya había sido señalada por organismos de control internos del Gobierno vasco, como la Oficina de Control Económico y la Comisión Jurídica Asesora de Euskadi (COJUA), que a pesar de emitir informes favorables, no pudieron ignorar la ausencia de este documento esencial.

Reacción del Gobierno

Frente a este revés judicial, el Departamento de Educación ha anunciado su intención de recurrir la sentencia, asegurando que mantendrá el decreto en vigor hasta que se emita un nuevo fallo. Por otro lado, partidos de la oposición, como EH Bildu y el PP vasco, ya han exigido explicaciones sobre esta situación y las implicaciones que puede tener, especialmente con la inminente apertura del periodo de prematriculación que comenzará el próximo 3 de febrero en Euskadi.

Cohesión del PNV

En respuesta a este escándalo, el lehendakari y los consejeros del PNV han decidido cancelar sus agendas públicas durante dos días para mantener una reunión secreta, lo cual ha despertado aún más especulaciones sobre la cohesión de su gabinete. La falta de transparencia en la gestión de este asunto ha llevado a muchos a cuestionar la viabilidad de la Ley de Educación, un tema delicado que ha estado bajo el escrutinio público desde su aprobación.

Conclusión

En este clima de incertidumbre, el futuro de la educación pública en el País Vasco se encuentra en una encrucijada. La falta de claridad en las decisiones tomadas y la necesidad urgente de abordar la segregación escolar sigue preocupando a la sociedad, mientras los padres y educadores aguardan respuestas.