La realidad que enfrentan los fabricantes europeos de motocicletas no está enfocada en la transición hacia la electrificación, sino en la creciente presencia de marcas chinas en el mercado. Así lo ha indicado Claudio Domenicali, CEO de Ducati, un referente en el sector que bien conoce los desafíos actuales.

En el contexto español, es innegable la validez de sus afirmaciones. Las marcas chinas como VOGE, Zontes y Benelli están comenzando a captar la atención del público, posicionándose como alternativas viables ante el aumento de precios de las motocicletas tradicionales europeas y japonesas. ¿Por qué pagar más cuando puedes obtener calidad a un precio competitivo?

Analizando las estadísticas de matriculaciones en España, vemos que Honda, Yamaha y Kymco dominan el mercado de scooters. Sin embargo, fuera de este nicho, los fabricantes chinos comienzan a mostrar una fortaleza sin precedentes. En el top 10 de matriculaciones, Voge y Zontes destacan con incrementos sorprendentes: un 128,46% para Voge y un 9,74% para Zontes. Esta situación coloca a estas marcas chinas por encima de KTM, que atraviesa uno de los momentos más inciertos de su historia.

Es notable cómo modelos como la Voge 900DSX, que monta un motor Loncin, similar al que utiliza BMW en su gama F900, están ganando popularidad. Mientras que la BMW F900GS tiene un precio de partida de 13.980 euros, la Voge, que incluye equipamiento superior, está disponible por solo 9.192 euros. ¡Una auténtica ganga! Este tipo de comparación se transforma en una tendencia que los consumidores no pueden ignorar.

Del mismo modo, en el segmento de las motos para carnet A2, modelos como la Benelli TRK 702 y la Moto Morini X-Cape están golpeando fuerte, ofreciendo prestaciones competitivas a precios mucho más accesibles que sus contrapartes europeas. Por ejemplo, motos de gama media como la Tracer 7 y la Versys 650 se venden a casi 10.000 euros. Este vacío en el mercado es precisamente donde las marcas chinas están plantando sus banderas.

La realidad es que quienes adquieren estas motocicletas son conscientes de que, a pesar de que los intervalos de mantenimiento pueden ser más cortos y los tiempos de espera para repuestos más prolongados, no todos buscan una moto para realizar largos viajes. Muchos compran para disfrutar del ocio sobre dos ruedas.

En cuanto a la transición eléctrica, los datos son claros: en las listas de motos más vendidas no aparece ninguna eléctrica, a pesar de que el sector está en crecimiento. La pasión por las motos sigue liderando la compra de vehículos, y los usuarios parecen resistirse al cambio hacia la electrificación. Según Domenicali, esta transición no es una preocupación inmediata para el sector en este momento.

Aunque Honda ha anunciado planes para la electrificación en futuras generaciones, su reciente presentación de conceptos en EICMA incluye solo un par de scooters y naked eléctricas, las cuales no reemplazarán a sus modelos más vendidos. Por su parte, Kawasaki, que introdujo la primera moto híbrida del mercado (de éxito limitado en ventas), también se muestra cautelosa al respecto.

A pesar de que las motos no electrificadas aún cuentan con una etiqueta C y enfrentarán restricciones en las áreas urbanas en un futuro no muy lejano, la conversación actual está centrada en la oleada de motos chinas en el mercado, dejando a un lado los planes de electrificación de los grandes fabricantes. ¿Podrían las marcas chinas convertirse en las reinas del asfalto? ¡El tiempo lo dirá!