¡Impactante! Just Eat demanda a Glovo por 295 millones de euros: Un Caso de Competencia Desleal que Sacude el Sector del Delivery
2025-01-14
Autor: José
Introducción
La justicia ha dado un paso importante al admitir a trámite la demanda interpuesta por Just Eat contra Glovo, donde la primera exige 295 millones de euros por competencia desleal. Este proceso comenzó el pasado 29 de noviembre en el Juzgado de lo Mercantil de Barcelona, y ha desatado una serie de acontecimientos sorprendentes en el sector del delivery.
Reacción de Glovo
Solo tres días después de que se conociera la demanda, Glovo anunció un cambio radical en su modelo de negocio, dejando atrás el controvertido uso de falsos autónomos para optar por contratar a sus repartidores. Este anuncio coincidió con la declaración de Óscar Pierre, CEO de Glovo, ante las autoridades judiciales, enfrentándose a acusaciones graves relacionadas con la vulneración de los derechos laborales.
Argumentos de Just Eat
En la comunicación oficial de Just Eat España, se argumenta que Glovo ha estado operando en un marco de competencia desleal al violar normativas laborales y contratar falsos autónomos. Esto ha permitido a Glovo ahorrar más de 645 millones de euros a lo largo de los años, lo que le ha otorgado una ventaja competitiva sin precedentes.
Compromiso de Just Eat
Por su parte, Just Eat, que opera en España desde 2010 con una plantilla de más de 2,500 trabajadores, ha destacado su compromiso con las normativas laborales, afirmando que ha sido pionera en la firma de convenios colectivos con los sindicatos.
El futuro de Glovo
Mientras tanto, el contexto del cambio de Glovo no deja de ser complicado. En su comunicado del 2 de diciembre de 2024, la empresa declaró su intención de implementar un nuevo modelo en España que incluiría a trabajadores asalariados, abarcando más de 900 ciudades. Sin embargo, el futuro de su relación laboral con miles de repartidores todavía genera interrogantes.
Situación de los repartidores
Según informaciones recientes, Glovo asegura tener alrededor de 15,000 repartidores en el país, pero no aclara la situación de aquellos que se encuentran en situaciones irregulares.
Conclusión
La pregunta que todos se hacen es: ¿será este el comienzo de un cambio significativo en la industria del delivery en España o la competencia desleal se mantendrá oculta bajo la superficie? Este caso está despertando no solo el interés del sector sino también el de los usuarios que cada vez son más conscientes de los derechos laborales de aquellos que les traen su comida.