El martes 29 de octubre, el centro comercial Bonaire, ubicado en Aldaia, sufrió una devastadora inundación debido a una DANA que ha cobrado la vida de decenas de personas en la región de Valencia. Las primeras imágenes revelaban un panorama desolador: la planta baja del centro comercial estaba completamente inundada, y las escenas de saqueos comenzaron a aparecer rápidamente en las redes sociales.

Tres días después del desastre, el panorama es aún más alarmante. Se observan imágenes de un estacionamiento completamente anegado y daños estructurales considerables en todo el recinto comercial. Estas imágenes impactantes dan testimonio del caos y la tragedia que han azotado a la comunidad.

El agua inundó los locales comerciales en la planta baja, así como las áreas de estacionamiento subterráneo, donde normalmente se resguardan cientos de vehículos, que se convirtieron en trampas mortales bajo la fuerza de la tormenta.

La magnitud de la inundación fue tal, que logró desplazar expositores y mobiliario de los diferentes locales, haciendo que los saqueos se convirtieran en una de las imágenes más virales de esta tragedia, reflejando la desesperación de muchos en un momento de crisis.

En respuesta a estos actos delictivos, la Fiscalía de Valencia ha decidido solicitar prisión provisional para todos los detenidos acusados de robos y hurtos, aprovechándose de esta situación de vulnerabilidad. Entre los arrestados se encuentran aquellos que intentaron saquear comercios dentro del centro comercial durante la noche del martes. Esta situación no solo resalta la gravedad de la tragedia, sino también la importancia de la recuperación y la seguridad en tiempos de crisis.

La comunidad de Aldaia se enfrenta a un largo proceso de recuperación, mientras muchos aún buscan a sus seres queridos desaparecidos y se esfuerzan por reconstruir sus vidas tras la devastación.