¡No faltó nadie! La hinchada alavesista ha respondido a la llamada de Iraultza con una auténtica fiesta en la previa del emocionante encuentro del domingo contra el Real Madrid.

A pesar de un fuerte chaparrón que retrasó la llegada del autobús al hotel Silken Ciudad de Vitoria, decenas de fervientes aficionados se agruparon para alentar y dar ánimo a sus jugadores.

Los jugadores del Alavés, al bajar del autobús, se acercaron rápidamente a la multitud, escuchando los cánticos de aliento, aplaudiendo y mostrando su agradecimiento por el apoyo incondicional.

Este encuentro es vital para afianzar su posición en la tabla y alejarse de los puestos de descenso, que están peligrosamente cerca tras la victoria de rivales como el Espanyol y con Las Palmas y Leganés acechando a solo un punto.

Pero no será una tarea sencilla, ya que el Real Madrid busca recuperar terreno después de un pequeño bache. Sin Ancelotti en el banquillo debido a una sanción, este domingo promete ser un choque intenso.

El estadio Mendizorrotza ya ha colgado el cartel de lleno, siendo este el tercer partido completo de la temporada, y la energía de los aficionados podría ser la clave en este enfrentamiento crucial.