Ciencia

¡Euskadi en las Estrellas! Descubre la Revolución Espacial que Está Transformando el Futuro

2024-12-25

Autor: Manuel

En un momento crucial de la historia, en 1967, un grupo de siete ingenieros de Sener, una empresa de Bizkaia, emprendió un viaje a la gélida Kiruna, en Suecia, para participar en la construcción de una torre de lanzamiento de cohetes científicos, marcando el inicio de la contribución de la industria vasca a la exploración espacial. Esta pequeña ciudad, ubicada cerca del Círculo Polar Ártico, estuvo en el foco público gracias al documental «El abismo Kiruna», que retrata la desesperada situación de sus 16.000 habitantes al enfrentar el hundimiento del terreno.

Desde aquellos primeros pasos en la carrera espacial, Euskadi ha estado involucrada en misiones notables, tales como el telescopio Hubble y la Estación Espacial Internacional. Las empresas vascas han desempeñado papeles cruciales, enviando satélites en cohetes de Elon Musk y participando en proyectos para crear eclipses artificiales y estudiar el sol. Además, se espera que Euskadi colabore en la futura estación espacial lunar y en el desarrollo de los telescopios más grandes del mundo.

En la actualidad, Euskadi cuenta con 27 empresas dedicadas al sector espacial, generando una facturación de 110 millones de euros el año pasado, lo que representa el 9% del total nacional y un crecimiento significativo respecto a hace una década. Casi 900 profesionales trabajan en esta industria en la región, un aumento notable en comparación con los 36 millones de hace diez años. La industria espacial global está en auge, con proyecciones que alcanzan los 1,8 billones de dólares en 2035.

La figura de Elon Musk ha sido fundamental para este crecimiento. Según el director general de Aeroespacial y Defensa en Sener, José Julián Echevarría, la influencia de Musk ha sido disruptiva para el sector. Empresas como Added Value Solutions (AVS) están buscando nuevos talentos para sus proyectos a largo plazo, complementados por el examen de 250 profesionales graduados del Máster en Ciencia y Tecnología Espacial de la Escuela de Ingeniería de Bilbao.

Una de las empresas más relevantes, Satlantis, ha desarrollado satélites que están cambiando el paradigma de la observación de la Tierra. El Urdaneta, lanzado el 26 de agosto de 2022, fue el primer satélite construido por una empresa vasca, capaz de capturar imágenes con una precisión de dos metros, dirigido hacia fines agrícolas y medioambientales. Este ha sido seguido por otros desarrollos como el Urdaneta 2 y el Horacio, mostrando el continuo avance del sector.

Además, la innovación no se detiene aquí. En agosto de 2023, el primer satélite completamente desarrollado en Euskadi, el Lur-1, fue lanzado con el objetivo de ofrecer información vital sobre la vegetación y las costas de la región, y destacándose como el primer satélite europeo que será recuperado, evitando contribuir a la creciente basura espacial. Este avance también se complementa con el lanzamiento de dos satélites más, Occulter y Coronagraph, cuyo objetivo es crear eclipses solares artificiales, un proyecto ambicioso que ha capturado la atención mundial.

Euskadi también está comprometida con los ambiciosos planes de exploración lunar y marciana. Sener contribuirá a la estación espacial lunar Gateway, mientras que AVS ha recibido el encargo de la NASA para construir un brazo robótico que recogerá muestras en Marte.

La industria no solo se limita a cohetes y satélites; la observación astronómica es otro de los bastiones de la ciencia en Euskadi. A través de Idom, se ha colaborado en proyectos para algunos de los telescopios más grandes del mundo, que son esenciales para la investigación astronómica. Estos colosos, como el Extremely Large Telescope (ELT), requieren tecnología avanzada y un diseño cuidadoso para maximizar su capacidad de captación de luz.

En resumen, Euskadi está en el corazón de la revolución espacial, un lugar donde la innovación y la exploración se encuentran a la vanguardia de la ciencia y la tecnología. El futuro es brillante, y el compromiso de la región con el espacio promete grandes descubrimientos y un papel destacado en la próxima era de la exploración espacial.