La Generalitat Valenciana ha decidido indemnizar a un hombre con 49.104,44 euros tras un caso médico extraordinario que dejó a muchos boquiabiertos: sufrió una erección ininterrumpida durante más de 30 horas. La historia no se detiene aquí, ya que su esposa también recibirá una compensación de 5.000 euros por daños morales, según el dictamen del Consejo Jurídico Consultivo de la Comunidad Valenciana (CJCV).

Los acontecimientos comenzaron en 2020, cuando el hombre, de 36 años, buscó atención médica en un centro de salud de Albaida tras experimentar cuatro horas de erección. Después de ser diagnosticado con priapismo, acudió al Hospital de Ontiyent donde, según los denunciantes, el tratamiento fue retrasado de manera preocupante.

Tras 20 horas sin mejoras, el matrimonio regresó al hospital y, sorprendentemente, tras un día completo de erección continua, finalmente le dieron el alta. Se le programó una cita preferente con el servicio de urología, pero en cuestión de momentos se vio obligado a volver al hospital. Finalmente, fue trasladado a Xàtiva, donde fue ingresado por primera vez desde que iniciaron los síntomas.

El informe pericial destaca que, tras los síntomas iniciales, el paciente presentó una fiebre, posiblemente como consecuencia de la lesión en los cuerpos cavernosos. Tras controlar la fiebre, recibió el alta, pero días después fue sometido a una intervención quirúrgica programada para la colocación de una prótesis maleable de pene, la cual se realizó sin complicaciones.

No obstante, el drama no terminó ahí. Poco después de la intervención, el paciente tuvo que regresar al hospital porque la prótesis se desplazó, lo que, según los expertos, fue resultado de una mala colocación. Esto llevó al joven a sufrir secuelas, incluyendo disfunción eréctil permanente, pérdida de sensibilidad y fuerza en el brazo derecho, y dolor neuropático en la pierna izquierda.

Tras múltiples intervenciones quirúrgicas y casi cuatro años de complicaciones, el matrimonio finalmente verá una compensación económica que ronda los 55.000 euros. Este caso ha desatado un debate en la comunidad médica sobre la atención a situaciones de emergencia, y ha resaltado la importancia de la atención oportuna en casos de priapismo, una condición que, si no se trata a tiempo, puede tener consecuencias devastadoras.