Un nuevo capítulo en la historia de un criminal infame

Miguel Carcaño, conocido por ser el asesino de Marta del Castillo, ha sido objeto de un sorpresivo traslado de la prisión de Herrera de la Mancha a la de Archidona. Esta decisión se tomó después de que se revelara que el reo fue encontrado en su celda con una tablet y un pen drive con conexión WiFi, elementos totalmente prohibidos para cualquier prisionero.

Descubrimiento inesperado en la panadería

Según informes de Mediaset, el hallazgo ocurrió durante un registro en la panadería de la prisión, donde Carcaño trabajaba y había logrado ganarse la confianza del personal. Allí, los funcionarios encontraron un teléfono móvil. Varios testimonios sugieren que alguien vinculado a la prisión pudo haberle introducido estos dispositivos, permitiéndole disfrutar de ellos al menos durante un año y medio.

Un traslado que despierta polémica

Este traslado no es solo una respuesta a sus acciones, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad en las prisiones y los privilegios que algunos reclusos pueden disfrutar. La cárcel de Archidona, conocida como la 'prisión palacio', ofrece lujos como una piscina climatizada y un gimnasio, lo que contrasta marcadamente con el crimen que cometió.

¿Cuándo tendrá su libertad?

Es importante recordar que Carcaño no cumplirá su condena completa hasta mayo de 2030. Para entonces, tendrá 41 años y habrá pasado más de la mitad de su vida tras las rejas. No solo se enfrenta a su pena de prisión por el asesinato, sino que además se le ha prohibido residir en Sevilla hasta el año 2043., lo que evita que esté cerca de la familia de Marta.

La herida sigue abierta para la familia de Marta

La actitud de Carcaño a lo largo de los años ha hecho aún más difícil para la familia de Marta encontrar paz. La búsqueda de su cuerpo continúa, y su dolor se agrava a medida que el tiempo pasa sin respuestas. Como consecuencia de su negativa a colaborar en la localización de Marta, el Tribunal Supremo le impuso una pena adicional por un delito contra la integridad moral.

Las fuentes judiciales anticipan que Carcaño no verá la libertad hasta que su cumplimiento de pena esté a la vista, dejando a todos con la interrogante de hasta dónde llegará la justicia en este caso tan doloroso.