¡Increíble pero cierto! El 2 de octubre, cuatro solicitantes de asilo marroquíes lograron burlar la seguridad del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, ascendiendo por el techo de una de las salas de acogida hasta alcanzar una azotea de la que desaparecieron sin dejar rastro. Y parece que la historia se repite: este domingo, otros seis ciudadanos marroquíes también se escaparon a través de un agujero en el techo. La buena noticia es que la Policía Nacional logró detener a tres de ellos, según lo reportado por Efe.

El sindicato Jupol ha alzado la voz, denunciando esta nueva escapada como una prueba más de la falta de seguridad en la sala de inadmitidos, donde los solicitantes de asilo esperan la resolución de sus peticiones de protección internacional. Todo esto ocurrió ‘por el mismo agujero’ que quedó sin reparar desde la reciente fuga anterior, lo cual plantea serias preguntas sobre la gestión del Ministerio del Interior y Aena, la empresa que administe las instalaciones.

Ibón Domínguez, portavoz de Jupol, ha enfatizado que la sala de inadmitidos en Barajas carece de las condiciones mínimas de seguridad y salud. Ha instado a una implicación activa por parte de todas las administraciones involucradas para resolver esta situación “inadmisible”.

Este suceso se suma a crecientes preocupaciones sobre la gestión de los procesos de asilo en España, donde cada vez más solicitantes se sienten atraídos por las condiciones del país, pero enfrentan obstáculos peligrosos en su búsqueda de protección. La situación se complica aún más por la falta de recursos y las lentas tramitaciones que agravan la desesperación de estas personas.

¡Sigue atento, porque este tema promete generar más controversia en los días venideros!