Este domingo, Al Jazeera ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional tras la incursión violenta de soldados israelíes en sus oficinas de Ramala, ubicadas en la ocupada Cisjordania. Según reportes del jefe de la oficina, Walid al-Omari, los soldados, que estaban fuertemente armados, no solo confiscaron, sino que también destruyeron equipos esenciales para la operación de la cadena.

A pesar de que la orden emitida por las autoridades israelíes solo estipulaba el cierre de las oficinas, Al Jazeera observó que los soldados llevaron a cabo un exagerado proceso de incautación de equipos, atacando la infraestructura de la organización.

Durante este violento allanamiento, los soldados arrancaron un cartel con la imagen de la periodista Shireen Abu Akleh, quien fue trágicamente asesinada hace dos años por un soldado israelí mientras cubría una redada militar en Cisjordania. Su muerte no solo generó una ola de condenas internacionales, sino que también intensificó las tensiones entre Israel y el canal, aumentando las preocupaciones sobre la seguridad de los periodistas en la región.

La respuesta del Gobierno de Gaza fue contundente: su oficina de medios condenó enérgicamente la acción del Ejército israelí, calificando la decisión de cerrar las oficinas de Al Jazeera como un "crimen" y una "flagrante violación del derecho internacional". A través de un comunicado en Telegram, se destacó que esta maniobra evidencia "la debilidad y fragilidad de la narrativa israelí ante la verdad y los hechos palpables en el terreno."

Además, el comunicado instó a los sindicatos de prensa y a las organizaciones mediáticas en todo el mundo a alzar su voz contra este acto de censura, haciendo un llamado a la solidaridad internacional con Al Jazeera en defensa de la libertad de prensa.

Este incidente pone de manifiesto la creciente represión de la libertad de expresión en áreas de conflicto y la urgencia de proteger a los periodistas que arriesgan sus vidas para informar sobre la situación en Gaza y Cisjordania. ¿Qué medidas tomarán los organismos internacionales para asegurar la protección de los medios y la verdad? La comunidad global observa con preocupación.