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¡El insólito vacile de Augusto Batalla a Joan Jordán tras su penalti fallido a lo Panenka!

2025-03-29

Autor: David

El emocionante partido entre el Deportivo Alavés y el Rayo Vallecano en Mendizorroza comenzó con una intensidad inesperada para un duelo con tanto en juego. Lo que normalmente debería ser un encuentro ordenado y disciplinado, se convirtió en un espectáculo lleno de sorpresas y errores. Los visitantes fueron los primeros en marcar gracias a Pathé Ciss, quien puso por delante a los madrileños. Cuando el Alavés tuvo la oportunidad de igualar mediante un penalti ejecutado por Joan Jordán, la tensión creció al máximo, y lo que ocurrió dejó a todos boquiabiertos.

Pocos minutos después del gol de Ciss, Jordán se encontró con la oportunidad perfecta de empatar, resultado de una falta que dio lugar a la pena máxima a favor del Alavés. Con determinación, el jugador del Alavés tomó el balón para lanzar el penalti, pero lo que vino no era lo que nadie esperaba.

Joan Jordán decidió ejecutar su penalti a lo Panenka, pero el tiro fue demasiado flojo y predecible. Augusto Batalla, el portero del Rayo, ni siquiera tuvo que moverse mucho; simplemente levantó los brazos y atrapó el balón con facilidad. Este momento se convirtió en el tema de conversación del partido, ya que Batalla no perdió la oportunidad de vacilar al jugador del Alavés. Con una sonrisa traviesa, levantó la mano y gritó "¡no, no!" mientras miraba a Jordán, quien, visiblemente avergonzado, no podía creer lo que había sucedido.

Este penalti fallido no solo afectó el ánimo del equipo local, sino que también encendió la rivalidad entre ambos clubes, que tienen una historia rica en enfrentamientos intensos. El Rayo Vallecano, conocido por su carácter luchador, aprovechó la inercia emocional del encuentro. Con el partido aún en juego, el Alavés se vio obligado a redoblar esfuerzos para tratar de revertir la situación.

Este evento remarca la importancia de la concentración y confianza en momentos críticos de un partido, dejando en claro que los detalles pueden cambiar el rumbo de un encuentro.