Tecnología

El futuro de Intel en la cuerda floja: 'Clearwater Forest' será el primer SoC masivo en el nodo 18A

2024-09-25

Intel se enfrenta a tiempos inciertos y cruciales en su historia. Las decisiones que tomen en estos momentos, lideradas por el CEO Pat Gelsinger y otros ejecutivos, podrían definir el destino de la empresa. Recientemente, Ben Sell, vicepresidente de desarrollo de tecnología, confirmó que los esperados microprocesadores de escritorio, bajo el código 'Arrow Lake-S', no se fabricarán en el nodo Intel 20A como originalmente se planificó.

Sell mencionó que el nodo 18A ha madurado lo suficiente para iniciar la producción a gran escala en 2025, gracias a recursos que serán reorientados desde el nodo 20A. Este cambio estratégico, tal como lo explicó Dave Zinsser, CFO de Intel, busca ahorrar 500 millones de dólares, una decisión lógica en el contexto financiero difícil por el que atraviesa la compañía.

El nodo 18A será la estrella del próximo capítulo de Intel. De hecho, Intel ha asegurado una inyección de hasta 3.000 millones de dólares a través de la iniciativa 'Chips and Science Act' para fabricar semiconductores de manera confiable para el gobierno estadounidense. Este programa, conocido como "Enclave seguro", estipula que la producción se realice bajo estricta confidencialidad, y se prevé que los chips se elaboren en el nuevo nodo 18A.

La familia de chips 'Clearwater Forest' jugará un papel determinante en esta nueva etapa de Intel. Este primer chip, destinado a servidores y estaciones de trabajo, será crucial para evaluar si el nodo 18A puede cumplir con las expectativas de producción masiva. Pat Gelsinger ha enfatizado la importancia de esta tecnología, que podría revitalizar a la compañía si logra optimizar los procesos de fabricación necesarios para presentar 'Clearwater Forest' a tiempo.

Intel planea diversificar la producción de otros procesadores en el nodo 18A, pero el éxito de la fabricación del chip 'Clearwater Forest' es esencial para recuperar la confianza de sus clientes. Si la producción a gran escala comienza en 2025 sin contratiempos, esto también significará que Intel cumplirá con su ambicioso plan de "cinco nodos en cuatro años".

Interesantemente, los primeros modelos de 'Clearwater Forest' ya se han fabricado, aunque en cantidades limitadas para propósitos de prueba, como se pudo ver en el reciente evento 'Enterprise Tech Tour' en Oregón. Sin embargo, Sell ha indicado que aunque el nodo 18A ya ha alcanzado cierta madurez, la producción masiva no se materializará antes de 2025.

La situación del nodo 18A es decisiva para el futuro de Intel. La compañía confía en que su tecnología de integración se compare favorablemente con la de su rival TSMC. Si esto se concretiza, podría marcar un punto de inflexión en la recuperación de Intel. Con tensiones geopolíticas y una feroz competencia en el ámbito de los semiconductores, el futuro de Intel seguirá siendo un tema de gran interés y expectativa en la comunidad tecnológica.