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El fundador de Joma: La inspiradora historia de Fructuoso López y su camino al éxito

2025-01-01

Autor: Lucia

El fundador de Joma, Fructuoso López, quien a sus 81 años continúa trabajando con la misma pasión del primer día, comparte su emocionante trayectoria desde un pequeño taller de zapatos en su pueblo natal hasta convertir su marca en un gigante deportivo a nivel mundial. Al cruzar la puerta de la sede de Joma en Portillo de Toledo, una sensación de admiración inunda el ambiente, destacando su espíritu de lucha y humildad.

Fructuoso recuerda con nostalgia y emoción cómo sus padres, humildes agricultores, hicieron sacrificios para apoyarlo en su camino hacia el éxito. Desde muy joven, mientras ayudaba en un taller, supo que su destino era ser empresario. A los 17 años, ya estaba llevando a la gente a excursiones con autobuses que él mismo alquilaba.

Con un fuerte deseo por la libertad y la independencia, decide abrir su propio camino. Tras finalizar su servicio militar, empieza a trabajar en Calzados Marcos, donde logra negociar con su jefe para llevarse una máquina y varios pares de hormas a casa. Así nació la idea de Joma en su hogar, en el altillo de la casa de sus padres.

A los 24 años, logra comprar una antigua fábrica en Fuensalida y funda oficialmente Joma en 1969. La compañía empezó con solo ocho empleados, pero hoy cuenta con más de 400 trabajadores y su presencia se extiende a más de 120 países. Fructuoso recuerda las dificultades iniciales, como el escepticismo de los clientes y la feroz competencia de marcas como Adidas y Nike. Pero su ingenio y visión le permitieron abrir camino en el mercado.

Una de sus jugadas más audaces fue introducir botas de fútbol de colores, una idea revolucionaria que fue inicialmente recibida con resistencia. A través de la persuasión y la creatividad, logró que los clientes se interesaran, y rápidamente la industria le siguió. Esta innovación llevó a Joma a ser líder en ventas de botas de fútbol en España en 1992, superando a marcas consolidadas.

El legado de Fructuoso no solo radica en su éxito empresarial, sino también en los valores que ha inculcado a su familia. Consciente de la importancia de preservar la esencia familiar de la marca, transmite a sus hijos el mensaje de que siempre deben cumplir lo que prometen. A pesar de las tentaciones del éxito y la fama, se muestra dispuesto a mantener la integridad de Joma.

Hoy en día, Fructuoso sigue siendo un ejemplo de humildad y trabajo duro, disfrutando de su vida en Portillo de Toledo y evitando los lujos, mientras continúa contribuyendo al crecimiento de una de las marcas deportivas más reconocidas del mundo. Su historia es un testimonio de que con pasión, visión y trabajo arduo, cualquier sueño puede convertirse en realidad.