En un giro inesperado de los acontecimientos, el cohete New Glenn se vio forzado a retrasar su lanzamiento en seis ocasiones antes de cancelar definitivamente la misión debido a un problema técnico. El cumpleaños de Jeff Bezos, presidente de Blue Origin, no se celebró como había planeado. Había soñado con estar presente en la sala de control mientras la nave se elevaba al espacio, pero a las 3 de la madrugada, sus ingenieros decidieron que era mejor abortar el vuelo.

El culpable de todo: una tubería congelada. Blue Origin reveló que se había formado hielo en un conducto responsable de purgar el gas en una de las unidades de potencia necesarias para alimentar los sistemas hidráulicos del cohete. Durante la ventana de tres horas para el lanzamiento, los ingenieros lucharon por derretir el hielo, pero sus esfuerzos resultaron en vano. Este tipo de inconvenientes no son infrecuentes en la industria espacial; de hecho, SpaceX enfrentó problemas similares con su Starship en su vuelo inaugural.

Pero eso no fue todo. El segundo intento de lanzamiento fue pospuesto por mal tiempo en la plataforma de lanzamiento LC-36 en Cabo Cañaveral. Además, las condiciones del mar, que son esenciales para el éxito del aterrizaje de la primera etapa del cohete sobre la barcaza llamada Jacklyn, influyeron en la decisión de posponer la misión. El nombre de la barcaza rinde homenaje a la madre de Jeff Bezos.

Un nuevo horizonte para el New Glenn llega: el lanzamiento ahora está programado para el jueves 16 de enero a las 6:00 UTC, lo que coincide con diferentes horarios en varias ciudades: Ciudad de México (UTC-6): 16 de enero, 00:00 Bogotá/Lima/Quito/Panáma (UTC-5): 16 de enero, 01:00 Caracas/La Paz/Santo Domingo (UTC-4): 16 de enero, 02:00 Santiago/Buenos Aires/Montevideo/Asunción (UTC-3): 16 de enero, 03:00 Washington/Nueva York/Miami (UTC-5): 16 de enero, 01:00 Los Ángeles (UTC-8): 15 de enero, 22:00 Madrid (UTC+1): 16 de enero, 07:00

Con cada retraso, las expectativas crecen. Los contratiempos técnicos son una realidad en el desarrollo de cohetes nuevos, especialmente con uno del tamaño monumental del New Glenn, que mide 98 metros de altura. Este cohete será el primero en tener capacidad orbital para Blue Origin, listo para desplegar su segunda etapa a una altitud impresionante de 19,300 kilómetros, transportando la plataforma de pruebas Blue Ring Pathfinder.

El vuelo NG-1 también es crucial, ya que marca el primer paso en el proceso de certificación que necesita Blue Origin para lanzar cargas de Seguridad Nacional. Se trata de uno de los sectores más rentables de la industria espacial estadounidense, donde la competencia se intensificará con rivales como el Falcon Heavy de SpaceX y el Vulcan de ULA.

El New Glenn, en honor a John Glenn, el primer estadounidense en orbitar la Tierra, es parte de los ambiciosos planes de Blue Origin, que incluyen desde la creación de una estación espacial comercial hasta los satélites Kuiper de Amazon, y vuelos tripulados a la Luna con la nave Blue Moon. ¡El futuro del espacio está más cerca que nunca!