
El asombroso truco de Duplantis: ¿puede la física superar los límites humanos?
2025-09-16
Autor: Ana
Duplantis supera una vez más los límites de la altura
El 12 de septiembre, bajo el cielo despejado de Bruselas, Armand "Mondo" Duplantis volvió a sorprender al mundo deportista al saltar 6,25 metros y batir el récord mundial en salto con pértiga. Lo hizo con una elegancia que parecía desafiar las leyes de la gravedad, haciendo que parezca fácil. Sin embargo, detrás de este impresionante logro se esconde un profundo conocimiento de la física.
Una danza entre ciencia y técnica
El salto con pértiga no solo es una prueba atlética; es un fenómeno mecánico en el que la energía cinética de la carrera se transforma en energía elástica y luego en energía gravitacional. En este proceso, el atleta se convierte en un maestro que navega entre técnica y ciencia, entre músculo y matemáticas.
El arte de la velocidad y la zancada perfecta
Duplantis no simplemente corre; su aceleración es milimétrica, alcanzando velocidades que rozan los 10 metros por segundo —un poco menos que Usain Bolt, pero aun así impresionante, considerando que transporta una pértiga de cinco metros. La velocidad es crucial para el salto; según la física, la altura máxima (h) se calcula con la fórmula h = v² / 2g, donde el cuadrado de la velocidad se divide entre la gravedad.
El truco de la postura aérea
A 9,9 m/s, en condiciones ideales, podría alcanzar cerca de los 5 metros. Sin embargo, la verdadera magia de Duplantis ocurre cuando se arquea en el aire, trasladando su centro de masa por debajo de su cuerpo. Esto le permite ganar centímetros extra sin necesidad de elevarse más, burlando las restricciones de la gravedad.
Optimización de recursos: el equipamiento de un campeón
Cada detalle cuenta en la hazaña de Duplantis. Sus pértigas, fabricadas con fibra de vidrio o carbono, maximizan la energía elástica acumulada, mientras que sus zapatillas especializadas le aseguran un agarre óptimo al despegar. Estos avances técnicos pueden ser la diferencia entre alcanzar la gloria o caer en el intento.
¿Hasta dónde puede llegar el ser humano?
Aunque el salto con pértiga parece no tener límites, la ciencia establece un techo. Considerando la velocidad máxima que puede alcanzar un humano, como los 12,2 m/s de Usain Bolt, la altura teórica sería de 8,8 metros. Sin embargo, esto resulta ser pura ciencia ficción en el contexto del salto con pértiga.
En condiciones realistas, tomando en cuenta una velocidad de 10,5 m/s y los beneficios del impulso final, el límite práctico se sitúa en alrededor de 6,81 metros. Tras considerar las inevitables pérdidas por fricción y fatiga, los expertos creen que la barrera humana es de aproximadamente 6,4 a 6,5 metros, marcando la línea entre lo extraordinario y lo imposible.