El acuerdo para la nueva Comisión Europea al borde del colapso: ¿Tendrá el PPE que rendirse?
2024-11-13
Autor: Carmen
El proceso de formación de la nueva Comisión Europea enfrenta una crisis inminente, provocada por las maniobras del Partido Popular español contra la ministra Teresa Ribera. Estas acciones parecen tener como objetivo desviar la atención de la gestión del PP durante la dana en Valencia. Los socialistas europeos han denunciado que el PPE está rompiendo la mayoría proeuropea al alinearse con fuerzas más extremas en su ataque a Ribera, revelando tensiones profundas en la política comunitaria.
Recientemente, los líderes de los tres principales grupos proeuropeos en el Parlamento Europeo - PPE, socialdemócratas (S&D) y liberales de Renew - se reunieron con Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, para discutir el complicado futuro de la revisión de Ribera y otros candidatos a vicepresidencias comunitarias. Sin embargo, la reunión terminó sin un consenso claro, dejando a todos en un estado de incertidumbre.
A pesar de la falta de avances, los socialdemócratas están presionando para que en las negociaciones, se reduzca la influencia del candidato italiano propuesto por Giorgia Meloni y del húngaro Olivér Varhelyi. De acuerdo con las declaraciones de varios eurodiputados, el PPE debe explicar su postura ante los ciudadanos europeos, enfatizando que el futuro del continente está en juego.
En un giro inesperado, Valérie Hayer, líder de Renew, ha advertido que las negociaciones pueden colapsar por la irresponsabilidad de ciertos grupos políticos. La situación se ha vuelto crítica, especialmente porque el tiempo apremia para formar la nueva Comisión, que debería estar lista para el 1 de diciembre. Von der Leyen, quien tiene buenos vínculos con el presidente español Pedro Sánchez, está intentando evitar un estancamiento que podría desestabilizar aún más la política europea.
Dicha crisis no solo pone en riesgo la estabilidad de la nueva Comisión, sino que también expone las luchas de poder dentro del PPE europeo, ayudados por figuras como Manfred Weber, quienes buscan infiltrarse en los diferentes niveles de poder política en Europa. La presión aumenta a medida que se aproximan elecciones anticipadas en Alemania y otros eventos decisivos.
Si la situación no se resuelve esta semana, las consecuencias podrían ser graves, no solo para el uso eficiente de las instituciones europeas, sino también para la imagen del PPE, que podría ser visto como un partido que prioriza la política nacional sobre la estabilidad comunitaria. El clima político actual compuesto por conflictos internacionales y crisis internas, como la guerra de Rusia contra Ucrania y la creciente presión económica en Alemania, exige una respuesta proactive y cohesiva que ahora está en duda.