El emocionante derbi entre el Sevilla y el Real Betis se decidió por un polémico penalti en el minuto 50, transformado por Lukebakio. Esta decisión arbitral desató una tormenta de reacciones, especialmente por parte de Diego Llorente, defensor del Betis, quien no pudo ocultar su indignación. "El árbitro se ha equivocado tremendamente en el penalti", afirmó rotundamente.

Llorente explicó la jugada que provocó el polémico penalti, defendiendo su posición: "Mi mano estaba en diagonal hacia abajo, no arriba como él afirma. ¡Nos miente a la cara! Además, el VAR no le llama para revisar la jugada. Es una herramienta que debería ayudar a corregir errores, y si el del VAR tampoco le dice nada, es frustrante. La televisión mostró claramente que no fue penalti", manifestó.

El defensor continuó expresando su inquietud sobre el impacto de decisiones arbitrales erróneas en el fútbol: "No se puede jugar así. Mi brazo estaba abajo, es imposible saltar con los brazos pegados. Nos estamos cargando el deporte. Ya hemos sido perjudicados varias veces en las últimas semanas", sentenció.

Llorente también recordó una jugada polémica en un partido anterior: "Contra Las Palmas, a Johnny le dieron un rodillazo en la cabeza antes de tocar el balón. Solo pido respeto, aquí trabajamos duro cada semana, y hay árbitros que nos mienten sin ningún reparo".

Tras el partido, tanto el Sevilla como el Betis se mantienen con 12 puntos en la tabla de clasificación, ocupando el 10º y 12º lugar, respectivamente. La tensión entre estos dos equipos locales parece haber aumentado no solo en el campo, sino también en las declaraciones posteriores, lo que abre un nuevo capítulo en su rivalidad.

Las reacciones en las redes sociales no se hicieron esperar, con aficionados y expertos del fútbol debatiendo sobre la actuación del árbitro. Algunos incluso exigen la implementación de un sistema más riguroso para evaluar las decisiones arbitrales. ¿Cambiará la percepción del VAR en el fútbol español tras estas polémicas?