El viaje de una pionera en el mundo del arte

Myriam Rubio, una talentosa madrileña de 53 años, ha demostrado que la perseverancia y la pasión son claves para triunfar. Desde su propio espacio de trabajo, que recuerda a la célebre habitación de Virginia Woolf, ha revolucionado el sector de la museografía en España. Su meta: dedicar el tiempo y amor que cada proyecto merece.

Proyectos que brillan en el circuito cultural

Su último logro es la exposición 'Búcaros' en el Museo de América de Madrid, donde explora la cerámica y su relación con el agua. Sin embargo, su impresionante cartera incluye colaboraciones con prestigiosas instituciones como el Museo del Prado, que en 2020 presentó 'Invitadas' sobre el impacto femenino en la pintura, y 'Jeans' en el Museo del Traje, mostrando la evolución del denim en 2023.

Esto es más que un trabajo, es un arte

Rubio reflexiona sobre el ascenso del sector cultural: "Cuando la economía está bien, también lo está la cultura". En 2010, decidió emprender su propio camino después de soportar la presión de una empresa que trataba a la creación como una línea de producción. Y así, en plena crisis económica, fundó Cuatroparedes en El Puerto de Santa María, priorizando la calidad y creatividad sobre la cantidad.

El arte de dar forma a la exposición

Cada vez que recibe un proyecto, Myriam se sumerge en la documentación y las discusiones creativas. Desde elegir el color de las paredes hasta la disposición de las obras, cada detalle cuenta. Conocida por su enfoque colaborativo, sus exposiciones son como películas, donde cada elemento debe encajar perfectamente.

Desafíos y decisiones en la museografía

A menudo, las obras deben ser ajustadas o incluso descartadas según el espacio disponible. La risa de Myriam revela la complicidad en el proceso: "Los comisarios suelen querer más, así que a veces tengo que sugerir que se elimine algo". Sus decisiones impactan la experiencia del espectador, asegurando que cada exhibición sea única y memorable.

Tendencias en el mundo de las exposiciones

Myriam vive un continuo cambio de tendencias en el mundo de las exposiciones. "Lo que está de moda hoy podría no serlo mañana", asegura. Actualmente, hay una creciente demanda de creatividad y teatralidad, impulsada por el auge de las exposiciones inmersivas. Su trabajo es un reflejo de esta evolución.