El Real Madrid, bajo la dirección de Carlo Ancelotti, ha decidido apelar la sanción impuesta a Vinicius por su expulsión con tarjeta roja directa en el reciente partido contra el Valencia en Mestalla. El club sostiene que la decisión arbitral no toma en cuenta el contexto de la jugada, donde Dimitrevski, el portero del Valencia, provocó a Vinicius, lo que llevó a que el brasileño reaccionara y le propinara un golpe en la cara.

A pesar de este recurso, la entidad madridista se prepara para lo peor y espera que la sanción a Vinicius sea de solo dos partidos, en lugar de cuatro. Ellos argumentan que no hubo una agresión evidente, lo que significaría un castigo mayor, y enfatizan que la provocación inicial por parte de Dimitrevski es un factor que debe ser considerado.

Si finalmente el Real Madrid tiene éxito en su apelación y Vinicius solo recibe dos partidos de sanción, se perderá encuentros cruciales en La Liga contra Las Palmas y Valladolid. Sin embargo, si la sanción se extiende a cuatro partidos, el jugador brasileño podría perder no solo esos partidos de liga, sino también un encuentro en la Copa del Rey, los dos de la Supercopa y potencialmente otro partido de Copa si el Real Madrid avanza en la competencia tras enfrentar a la Deportiva Minera. Es importante destacar que el Comité de Competición decidirá antes del lunes, coincidiendo con el partido de Copa que disputará el club.

El Real Madrid no solo está enfocado en la situación de Vinicius, sino que también muestra un fuerte descontento con el arbitraje del partido, especialmente con el árbitro Soto Grado y el uso del VAR. Los dirigentes del club creen que no se tuvieron en cuenta todas las circunstancias relacionadas con la expulsión de Vinicius y también están molestos por la decisión de no sancionar un penalti que fue fallado por Bellingham en ese mismo encuentro.

Este escándalo arbitral está exacerbando la tensión en el seno del club, donde ya se había hecho evidente una frustración por decisiones previas que han afectado su rendimiento en la temporada. La situación de Vinicius se convierte así en un punto de atención no solo en términos de su ausencia en el campo, sino también como un reflejo de un mayor descontento con el arbitraje en la liga.