Este lunes, Kaja Kallas, la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y de Seguridad, ha tomado una decisión crucial: enviar al principal diplomático de la UE en Siria a Damasco para establecer contactos con las nuevas autoridades del país. Este movimiento ha generado grandes expectativas sobre los próximos pasos que la UE tomará en su relación con estos nuevos líderes, quienes emergen tras la caída del régimen de Bashar Al Assad. Kallas ha declarado que esperan 'hechos' más que 'palabras' en el proceso de transición política en Siria.

Durante una reunión del Consejo de Asuntos Exteriores, Kallas indicó que discutirán la naturaleza de su compromiso con las nuevas autoridades islamistas: 'Hoy debatiremos sobre el nivel de nuestro compromiso y los pasos a seguir en caso de que se avance en la dirección correcta'.

Kallas recientemente asistió a una cumbre en Jordania, donde se reunió con países árabes, Turquía y Estados Unidos para coordinar estrategias sobre cómo vincularse con el nuevo gobierno sirio. "Es crucial que tanto los actores regionales como internacionales compartan una visión común para garantizar un país estable y pacífico", afirmó.

La política estonia agregó que Siria enfrenta un 'futuro optimista pero incierto', subrayando la necesidad de que este país tome decisiones acertadas. 'La comunidad internacional no solo quiere escuchar lo que dicen, sino también observar lo que hacen realmente. Las próximas semanas serán determinantes para ver si están en la dirección correcta', enfatizó.

En su primer Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores, Kallas subrayó la importancia de un enfoque unificado a nivel internacional y regional, excluyendo cualquier vacío de poder que pudiera surgir. Este movimiento de la UE es una clara señal de que no se están quedando al margen ante los acontecimientos en Siria.

Sin embargo, la situación es tensa. Recordemos que la familia Al Assad gobernó Siria desde 1971 hasta su colapso el 8 de diciembre, cuando el grupo insurgente islamista HTS tomó Damasco en una rápida ofensiva que duró solo 12 días y se llevó a cabo con mínima resistencia. A pesar de que la UE considera HTS como una organización terrorista, fuentes comunitarias han enfatizado que esto no es necesariamente un obstáculo para el contacto diplomático.

Además, se destaca que trabajar con las Naciones Unidas será clave para respaldar un proceso político dirigido por los propios sirios. La comunidad internacional observa con atención cómo se desarrollan los acontecimientos en Siria y si este cambio traerá un nuevo capítulo de paz y estabilidad en la región.