La situación en el PSOE de Castilla y León se ha vuelto crítica tras la controvertida propuesta de su líder, Luis Tudanca, que busca acelerar la renovación del partido. Esta maniobra ha generado un intenso debate interno y ha llevado a la ruptura de relaciones entre varios dirigentes socialistas. A pesar de que el calendario propuesto contraviene las directrices establecidas por el secretario general, Pedro Sánchez, Tudanca ha decidido pasar a la acción, desatando la ira de muchos de sus compañeros.

Los estatutos del PSOE son claros: cualquier calendario debe ser aprobado por una comisión ética. Sin embargo, la propuesta de Tudanca fue presentada de manera que muchos la consideran antidemocrática y carente de la transparencia necesaria. Durante la reunión donde se votó el calendario, los asistentes solo podían acceder a la información mediante un código QR, lo que generó confusión y descontento. Muchos no estaban al tanto de la magnitud de la operación y optaron por ausentarse al momento de la votación, desatando críticas que señalan la irregularidad del proceso.

Los secretarios provinciales de León, Ávila y Soria han expresado su desacuerdo, al igual que la portavoz del PSOE en Burgos, Esther Peña. Más de uno calificó la actitud de Tudanca como un 'golpe de estado' dentro del partido, lo que ha dejado a muchos miembros en estado de alerta sobre el futuro del PSOE en la región.

Con fechas clave ya establecidas —del 8 al 15 de octubre para presentaciones de precandidaturas, seguido de la recolección de avales— el congreso federal de finales de noviembre podría llegar con un candidato ya decidido desde Castilla y León. Algunos asistentes al Comité Autonómico lo ven como una violación grave de las reglas del partido, indicando que esto podría tener repercusiones a largo plazo para el futuro del PSOE en la comunidad.

La controversia en torno a esta decisión refleja un descontento creciente en las bases socialistas, y muchos se preguntan si esta es la mejor manera de preparar al partido para las próximas elecciones. ¿Está Tudanca jugando su última carta o realmente ha perdido el control del PSI en Castilla y León? La respuesta podría determinar el rumbo del partido en los próximos años.