¡Células T superalimentadas: El innovador avance que podría transformar la lucha contra el cáncer!
2025-01-28
Autor: Antonio
Un equipo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh ha logrado un notable avance en el cultivo de células T en laboratorio, permitiéndoles vivir más tiempo y atacar con mayor eficacia las células cancerosas de un modelo de ratón con melanoma. Este descubrimiento, publicado en la prestigiosa revista 'Cell Metabolism', podría significar una revolución en las terapias inmunológicas contra el cáncer.
El director del Centro de Microambiente Tumoral en el UPMC Hillman Cancer Center, Greg Delgoffe, destaca que el método tradicional para cultivar células T es ineficiente. "Producimos millones de células T y las infundimos en el paciente, pero muchas de ellas mueren rápidamente. Queremos desarrollar células T que sean más longevas y, por lo tanto, más efectivas en el tratamiento del cáncer."
En el campo de la terapia celular, se extraen células inmunitarias del paciente, se expanden en el laboratorio y se reintegran en el organismo para combatir enfermedades. Las terapias más avanzadas incluyen las células T con receptor quimérico de antígeno (CAR-T) y la terapia de linfocitos infiltrantes de tumores (TIL), que aprovechan las propias células del paciente para una lucha más efectiva contra el cáncer.
No obstante, según Andrew Frisch, principal autor del estudio, el proceso actual de cultivo no prepara adecuadamente estas células para sobrevivir una vez que son introducidas en el cuerpo del paciente. "El medio de cultivo tradicional tiene un alto contenido de glucosa, lo que lleva a una 'adicción' de las células T a este azúcar. Cuando son infundidas de nuevo, no saben cómo utilizar otras fuentes de energía y muchas mueren rápidamente."
Para solucionar este problema, el equipo de investigación introdujo el dicloroacetato (DCA) al medio de cultivo. Este compuesto altera el metabolismo de las células T, haciendo que sean menos dependientes de la glucosa y más capaces de utilizar otras fuentes de energía disponibles en el cuerpo.
Los resultados fueron sorprendentes: en ratones tratados con células T cultivadas con DCA, estas células sobrevivieron notablemente más tiempo. Casi un año después, más del 5% de las células T asesinas seguían circulando en el organismo, en comparación con las células T cultivadas sin DCA, que eran casi indetectables semanas después de la infusión. Además, las células T tratadas con DCA lograron un mejor control del tumor y mayor supervivencia en ratones con melanoma, mostrando una capacidad impresionante para rechazar un segundo desafío con células de melanoma.
Greg Delgoffe enfatiza la importancia de esta investigación: "Al limitar el acceso a ciertos 'alimentos', estamos entrenando a las células T para que metabolizen las fuentes de energía que normalmente usarían en el cuerpo, en lugar de depender del azúcar que les proporcionamos en el laboratorio. Si alimentamos correctamente a estas células T, estarán mejor preparadas para actuar en el cuerpo real y vivir mucho más tiempo. En esencia, podríamos tener un soldado en guardia de forma indefinida."
El objetivo final, señala Delgoffe, es conseguir que las terapias celulares contra el cáncer puedan ofrecer protección de por vida, similar a la inmunidad duradera que se logra con las vacunas. Este avance no solo podría cambiar las expectativas de los tratamientos oncológicos, sino también successivamente mejorar la calidad de vida de millones de pacientes en todo el mundo. ¡La esperanza en la lucha contra el cáncer está resurgiendo!