BBVA Refuerza su Estrategia

En un movimiento sorpresivo para mejorar la retribución a sus accionistas, BBVA ha ajustado su oferta por el Sabadell, ahora muy centrada en los dividendos. Este es el tercer ajuste que realiza desde que lanzó su oferta hostil en mayo del año pasado, destacando su intención de atraer a los pequeños inversores que constituyen la mitad del capital del Sabadell.

Detalles de la Nueva Oferta

La nueva propuesta de BBVA ofrece una acción adicional junto a 70 céntimos de euro por cada 5,5483 acciones del Sabadell, un cambio significativo desde su oferta inicial de una acción nueva por cada 4,83 del banco catalán. En octubre también hubo un ajuste previo, proponiendo una combinación de 29 céntimos en efectivo más una nueva acción por cada 5,019 títulos.

Dividendos en el Horizonte

Sabadell tiene planeado distribuir 1.300 millones de euros a sus accionistas en el ejercicio de 2025. Además, se espera que en diciembre introduzca otro dividendo y uno más entre marzo y abril de 2024, consolidando un año excepcional, ya que históricamente solo paga dos dividendos anuales. También está previsto un dividendo extraordinario en el primer trimestre de 2026, resultado de la venta de TSB al Santander.

La Hora de la Verdad se Acercó

BBVA está ansioso por cerrar este proceso en septiembre, a pesar de los numerosos obstáculos: el rechazo inicial del consejo del Sabadell, las restricciones impuestas por el Gobierno que prevén tres años sin fusiones, y la venta de TSB. Sin embargo, la situación es todavía incierta.

Expectativas para el Futuro

En los próximos días, se espera que BBVA presente su folleto final ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que incluirá detalles sobre las posibles sinergias y ahorros que la operación podría generar. Originalmente, BBVA había proyectado 850 millones en ahorros, pero el contexto actual plantea un escenario más complicado.

Dilemas Ocultos y Estrategias a Plantear

Uno de los aspectos más críticos a aclarar en su folleto es el cambio en la estructura de Sabadell tras la venta de su filial principal por 3.100 millones de euros. Con 2.500 millones de este monto distribuidos como macrodividendo para los accionistas en 2026, los inversores deberán decidir si aceptan la oferta de BBVA o si prefieren esperar este reparto.

La proyección es clara: BBVA enfrenta un dilema importante en esta fase decisiva. ¿Incrementará su oferta para asegurar su éxito en este ambicioso intento de adquisición?