Para muchos, una taza de café es la clave para empezar el día con energía. La cafeína no solo aumenta nuestra vitalidad, sino que también puede contribuir a la quema de calorías y reducir riesgos de enfermedades como el Alzheimer, problemas hepáticos y enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, si eres de los que tiene dificultades para dormir, ¡cuidado! Debes evitar el café, especialmente en la noche.

Investigaciones han demostrado que las personas nocturnas tienden a consumir más cafeína comparadas con los llamados 'madrugadores'. Estos estudios también indican que la cafeína puede alargar la vigilia de nuestro reloj biológico. Theresa Schnorbach, experta en sueño, advierte que aunque los efectos de la cafeína comienzan a notarse entre 30 a 40 minutos después de consumirla, pueden durar hasta 6 horas. Por lo tanto, es aconsejable que la última taza de café no sea más tarde de las 17:00 o 18:00 horas para evitar problemas en el descanso nocturno.

Recientemente, un estudio publicado en la revista Npj Science of Food ha revelado que no solo la cafeína, sino también los edulcorantes como el azúcar o la sacarina, alteran nuestros ritmos biológicos de manera alarmante. En experimentos realizados con ratones, se descubrió que la combinación de cafeína con edulcorantes podía provocar una inversión en sus ciclos día-noche. Si esto se aplica a los humanos, los efectos podrían ser devastadores para nuestra salud.

Los investigadores notaron que los ratones que consumieron agua con cafeína y edulcorantes experimentaron ciclos de sueño-vigilia de hasta 30 horas, y algunos incluso cambiaron su ritmo circadiano de nocturno a diurno. Este fenómeno se observó incluso en completa oscuridad, lo que sugiere que el impacto de la combinación cafeína-edulcorante actúa fuera del control del núcleo supraquiasmático, la parte del cerebro que regula nuestro reloj biológico.

Se teoriza que esta combinación genera señales contradictorias en nuestro organismo, probablemente mediadas por la dopamina. Tanto el café como los edulcorantes estimulan el sistema de recompensa en el cerebro, lo que podría llevar a una liberación excesiva de dopamina y contribuir a la alteración de los ritmos de actividad.

Los investigadores tienen la intención de profundizar en el análisis del vínculo entre la dopamina y estos efectos. Aunque los hallazgos actuales son preliminares y corresponden a un estudio con ratones, sus implicaciones en la salud humana son significativas. Muchas autoridades de salud ya aconsejan moderar la cafeína, especialmente por las tardes, debido a su asociación con una disminución en la calidad del sueño y otros problemas de salud mental y física. Esta nueva información sugiere que agregar edulcorantes al café puede intensificar estos efectos negativos todavía más.

Finalmente, los científicos también están interesados en explorar los efectos de consumir cafeína y edulcorantes por la mañana. Así que, si buscas un impulso extra, considera cuidadosamente cómo y cuándo endulzas tu café, ¡tu salud puede depender de ello!