Salud

¡Atención! Fiebre y dolores musculares: Síntomas que no debes ignorar del Norovirus y la Gripe

2025-01-22

Autor: Manuel

Este invierno está siendo testigo de un alarmante aumento en las tasas de infecciones respiratorias agudas (IRA) y gastroenteritis aguda provocadas por el norovirus. Estas infecciones son comunes en esta época del año, pero esta vez han colapsado los servicios de Atención Primaria, dejando a muchos en un estado de preocupación y alerta.

La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC) está haciendo un esfuerzo por concienciar a la población sobre la importancia de reconocer los síntomas. En el caso de infecciones respiratorias como la gripe, COVID-19 o VRS, los síntomas predominantes incluyen fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, congestión nasal, dolor de garganta y tos. Si experimentas un incremento en la severidad de estos síntomas, es crucial que busques atención médica. Factores como fiebre superior a 38,5°C que no mejora, coloración azulada en labios o piel, dolor torácico, desorientación, somnolencia excesiva o signos de deshidratación son motivos de preocupación.

En paralelo, el norovirus se propaga rápidamente por contacto con heces y vómito de personas infectadas, siendo viable en superficies, alimentos y agua contaminados. Los aerosoles generados durante el vómito también contribuyen a su contagio. Este virus es especialmente peligroso para los grupos vulnerables, como niños menores de dos años, ancianos e individuos inmunocomprometidos. Por ello, es vital prestar atención a los síntomas que aparecen entre 12 y 48 horas después de haber estado expuesto: náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, fiebre y malestar general.

La semFYC enfatiza que la mayoría de los casos de norovirus pueden tratarse en casa con reposo e hidratación. Sin embargo, es esencial prevenir la deshidratación mediante rehidratación oral y, en caso de síntomas leves, se recomienda el uso de analgésicos y antipiréticos para aliviar el dolor y la fiebre. Los antieméticos son efectivos para combatir las náuseas, y generalmente, los síntomas se presentan por un periodo de 3 a 4 días.

Para reducir el riesgo de contagio, es fundamental que las personas infectadas se aíslen en una habitación individual por al menos 48 horas después de empezar a mostrar síntomas. Mantener una estricta higiene de manos y desinfectar las áreas comunes son pasos cruciales para frenar el brote.

Sin embargo, se debe estar atento a las señales de alerta que pueden requerir atención médica urgente, como deshidratación severa, vómitos persistentes, dolor abdominal intenso, fiebre alta continua o alteraciones en el estado mental. La deshidratación puede ser una complicación muy grave, especialmente en pacientes con insuficiencia renal, sobreinfecciones por otros virus o desnutrición.

Mantente informado y cuídate: este invierno no te descuides, ¡tu salud puede depender de ello!