¡Alerta máxima en Mallorca! Tres torrentes, incluido el de sa Riera en Palma, al borde del desbordamiento por intensas lluvias
2024-11-01
Autor: Lucia
Este viernes, a las cuatro de la tarde, Palma se sumió en la oscuridad como si fuera de noche. La temperatura cayó drásticamente cuando una poderosa tormenta comenzó a descargar agua en la capital mallorquina, desde Son Rapinya hasta Son Ferriol, donde se están sucediendo las inundaciones y los coches estacionados están siendo arrastrados por las lluvias.
A pesar de esta caótica situación, la circulación era mínima gracias a que la población hizo caso a las advertencias y se quedó en casa. Un portavoz de la policía local expresó su alivio: «Menos mal que los ciudadanos han seguido los consejos y no han salido a la carretera». Sin embargo, la preocupación actual se centra en la crítica situación de los torrentes, que presentan un caudal alarmante. «Bajo ningún concepto los ciudadanos deben acercarse a los torrentes en estas condiciones», advirtió la misma fuente.
Particularmente peligroso es el torrente de sa Riera, donde la Policía Local de Palma está llevando a cabo revisiones constantes para asegurar que no haya personas en situación de vulnerabilidad en sus márgenes, ya que hay pequeños asentamientos de personas sin hogar en la zona. La respuesta a esta emergencia es crucial, y por ello, el Govern balear ha activado un monitorización exhaustiva de los torrentes de Mallorca para prevenir crecidas inesperadas. La consellera de Presidencia y Administraciones Públicas, Antònia Estarellas, destacó la importancia de estas medidas tras la reunión técnica del gabinete, instando a la ciudadanía a estar atenta a las actualizaciones meteorológicas y seguir las recomendaciones de las autoridades.
Además, las previsiones del tiempo indican que las lluvias continuarán durante el fin de semana, lo que incrementa el riesgo de desbordamientos en otros puntos de la isla. Los servicios de emergencia están en alerta, listos para actuar ante cualquier eventualidad. ¡Mantente informado y cuídate, Mallorca!