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¡Alerta en Barajas! La Policía pone en marcha un control especial para los migrantes magrebíes

2024-10-04

La Policía Nacional ha dado a conocer una insólita orden interna que establece 'un control especial de vigilancia' sobre las personas de 'origen magrebí' dentro del colectivo de migrantes inadmitidos en el aeropuerto de Madrid-Barajas. Esta medida se ha tomado tras el alarmante hecho de que 'el 100% de los fugados' de las áreas de confinamiento sean de origen magrebí.

Según un escrito al que ha tenido acceso elDiario.es, el pasado 30 de septiembre, cuatro migrantes magrebíes lograron escapar utilizando 'el modus operandi del rififí', que consiste en acceder a la azotea del aeropuerto y, desde allí, llegar a la zona pública de la T2. Ante esta situación, los agentes han argumentado que era urgente 'incrementar las medidas de seguridad'.

La fuga se produce en un contexto complicado, donde decenas de ciudadanos con pasaporte marroquí, incluidos muchos saharauis, se encuentran atrapados en varias terminales de Barajas, tras solicitar asilo al llegar a España. Estos solicitantes, la mayoría provenientes de un vuelo desde Marrakech con destino a Cuba, han utilizado su escala en Madrid para pedir protección internacional ante las autoridades españolas.

Sin embargo, hay incertidumbre respecto a la nacionalidad de estos migrantes, ya que muchos que afirman ser saharauis no son diferenciados por el Ministerio del Interior de aquellos que son marroquíes. Esto ha llevado a un escenario confuso y potencialmente discriminatorio para quienes necesitan protección internacional.

Recientemente, el Ministerio del Interior ha llevado a cabo la repatriación de 16 de estos solicitantes de asilo, a pesar de las recomendaciones de ACNUR, que instan a permitir que quienes han pedido el reconocimiento de la apatridia permanezcan en España, sobre todo considerando la situación crítica de estos individuos.

El Código Ético de la Policía Nacional, que coloca gran importancia en evitar cualquier tipo de discriminación, contrasta con estas acciones, que parecen pasar por alto principios básicos de igualdad. La Circular número 2/2012, que prohíbe actuaciones basadas sólo en criterios étnicos, también se ve comprometida en este tipo de operativa de control.

El documento que ordena el 'Reforzamiento de Seguridad de las Salas Inadmitidos/Asilo de T1, T2 y T4S' ha sido firmado por una inspectora jefe que supervisa a aproximadamente 250 policías nacionales.

Este control especial se suma a las crecientes preocupaciones sobre las condiciones en las que se encuentran los solicitantes de asilo en los aeropuertos españoles. La situación es extremadamente tensa, ya que estos individuos esperan en instalaciones de capacidad limitada, donde les es imposible salir mientras se procesa su solicitud. Si su petición es finalmente aceptada, obtendrán un permiso de residencia temporal, pero si se niega, serán devueltos a su país de origen.

La falta de atención adecuada a las solicitudes relacionadas con la apatridia, especialmente entre los saharauis, ha suscitado denuncias por parte de organizaciones de derechos humanos que alertan sobre la inadecuada respuesta gubernamental a esta crisis humanitaria. Además, Amnistía Internacional ha documentado repetidos abusos por parte de las autoridades marroquíes contra los saharauis en territorio ocupado, lo que hace aún más urgente el caso de estos migrantes en España.

El contexto actual resalta la complejidad de la crisis migratoria en Europa y la necesidad de un enfoque más humano y respetuoso de los derechos de las personas. La situación en Barajas es un llamado a la acción para reformar las políticas de asilo y garantizar que todos los solicitantes sean tratados con dignidad y respeto, independientemente de su origen.