Ciencia

¡Alerta! Aumento alarmante de casos de Alzheimer en personas menores de 65 años

2024-09-19

Los especialistas de Neurología del Hospital Universitario Reina Sofía han registrado un preocupante incremento en el diagnóstico de Alzheimer en individuos menores de 65 años. Este fenómeno es alarmante, ya que la enfermedad, que representa la forma más común de demencia, generalmente afecta a personas mayores de esa edad. La incidencia actual entre los más jóvenes ha sido del 0.05% para el grupo de 40 a 65 años, pero se estima que cada año se manifiestan entre 150 y 200 nuevos casos de Alzheimer presenil en Andalucía. En total, se calcula que alrededor de 120,000 andaluces sufren de esta enfermedad, y en Málaga, la cifra nacional asciende a 800,000.

El aumento en la detección temprana puede atribuirse a varias razones. Hay una mayor sensibilización pública sobre los síntomas del Alzheimer, un acceso más amplio a pruebas de diagnóstico avanzadas, como la tomografía por emisión de positrones (PET) y biomarcadores en el líquido cefalorraquídeo, que ya están disponibles en Andalucía. Esto ha permitido a los profesionales detectar la enfermedad en etapas más tempranas, proporcionando oportunidades para una intervención terapéutica más efectiva.

Más de 4,000 pacientes con Alzheimer acuden anualmente al Hospital Reina Sofía, y se diagnostican aproximadamente 300 casos nuevos cada año. Las cifras indican que entre el 20% y el 30% de estos pacientes son menores de 65 años, lo que subraya la importancia de educar a la sociedad sobre los signos de deterioro cognitivo.

Esta mañana, durante una jornada informativa, un equipo multidisciplinario compuesto por neurólogos, radiólogos y psicólogos, junto a autoridades de salud y representantes de la Asociación Alzheimer San Rafael, enfatizó la necesidad de continuar invirtiendo en investigación y programas de concienciación. La comunidad debe estar al tanto del impacto que esta enfermedad tiene no solo en el paciente sino también en sus familias.

El Alzheimer se produce debido a la acumulación anómala de proteínas en el cerebro que interrumpe la comunicación entre neuronas, provocando el deterioro de funciones cognitivas fundamentales, siendo la memoria la más afectada. Sin embargo, el impacto también puede extenderse a funciones del lenguaje, la percepción espacial y las funciones ejecutivas.

El Hospital Reina Sofía ofrece una unidad especializada donde se realizan determinaciones de biomarcadores en líquido cefalorraquídeo y consultas monográficas para un enfoque más profundo de los casos. A medida que se identifica el deterioro cognitivo, se inicia un tratamiento no farmacológico por medio de actividades de estimulación cognitiva, que son esenciales para retrasar la progresión de los síntomas.

En términos de medicación, aunque existen algunos tratamientos, estos han mostrado una efectividad limitada en la modificación de la evolución de la enfermedad. Los anticolinesterásicos y la memantina son los principales fármacos disponibles, pero el tratamiento no farmacológico es igualmente vital.

En cuanto a la investigación, se están explorando rápidamente nuevas estrategias de diagnóstico y tratamiento en el Hospital Reina Sofía. Entre las innovaciones más notables está la posibilidad de diagnosticar a través de un análisis de sangre que detecta proteínas relacionadas con la enfermedad, lo que podría revolucionar la forma en que se diagnostica y trata el Alzheimer.

Las terapias biológicas y los anticuerpos monoclonales dirigidos a eliminar las placas de beta-amiloide y proteína tau están en fase de estudio. Los expertos advierten que aunque algunos tratamientos están avanzando, aún nos encontramos en una etapa muy temprana en su aplicación clínica.

Con este panorama, la comunidad debe estar atenta y participar activamente en la búsqueda de soluciones frente al creciente desafío del Alzheimer. La concienciación y la investigación son claves para combatir esta enfermedad devastadora.