Este viernes, en el programa Mucho Gusto, se reveló una alarmante agresión que dejó boquiabiertos a los vecinos de La Florida, región Metropolitana, cuando un conserje tuvo que usar un extintor para defenderse de un grupo de jóvenes violentos.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 21:50 del miércoles pasado en un edificio situado en la Avenida Vicuña Mackenna, donde varios videos grabados por los residentes muestran la desesperante situación. Dos jóvenes comenzaron a romper los vidrios de la entrada del edificio utilizando fierros, mientras realizaban graffitis en las paredes y la puerta, desatando el caos.

La intención de los agresores no solo parecía ser vandalizar el lugar, sino también agredir a los conserjes, lo que llevó a uno de ellos a actuar en defensa propia utilizando un extintor como arma improvisada. Este acto heroico no solo evitó una agresión mayor, sino que también llamó la atención de los transeúntes, quienes quedaron sorprendidos por la valentía del conserje.

Después del enfrentamiento, los jóvenes, claramente en estado de ebriedad y posiblemente bajo el efecto de drogas, cruzaron la calle y abordaron un bus de la Red Movilidad, dejando una estela de confusión y miedo entre los testigos. Algunos testigos afirman que estos individuos antes habían atacado a un automovilista al que le pidieron dinero, lo que sugiere que no era la primera vez que se comportaban de esta manera.

El alcalde de La Florida, Daniel Reyes, corroboró esta versión, indicando que los agresores parecían estar persiguiendo a alguien que ingresó al edificio. Aunque el personal de seguridad municipal llegó poco después, la policía no respondió durante el incidente, lo que levantó más interrogantes sobre la seguridad en la comuna.

Además, en un giro inesperado, el alcalde mencionó que tanto los conserjes como la administración del edificio decidieron no presentar una denuncia formal ante Carabineros, lo que podría traer consigo consecuencias negativas en la percepción de seguridad en la zona.

Este alarmante episodio no solo pone en relieve la problemática de la violencia juvenil en Santiago, sino que también invita a una reflexión más profunda sobre la seguridad comunitaria y el apoyo a trabajadores que, a menudo, se encuentran en situaciones de riesgo. ¿Qué medidas se tomarán a partir de ahora para proteger a los ciudadanos y evitar que incidentes como este se repitan? La comunidad espera respuestas.