¿Son realmente saludables las infusiones de hojas de olivo? La ciencia revela la verdad
2025-01-25
Autor: Emilia
Las hojas de olivo están ganando popularidad como un ingrediente para infusiones, promovidas por sus supuestos beneficios para la salud. Sin embargo, con la creciente demanda de este producto, es fundamental profundizar en lo que dice la ciencia al respecto.
El famoso aceite de oliva ha sido un pilar de la dieta mediterránea, y España, uno de sus mayores productores, ha comenzado a explorar los subproductos de la olivera, como las hojas. Estas hojas no solo son utilizadas para hacer infusiones, sino también para enriquecer productos como el pan y en diversas formulaciones en herbolarios.
La clave de los beneficios atribuidos a las hojas de olivo se encuentra en un antioxidante conocido como oleuropeína. Esta sustancia, que se encuentra principalmente en las aceitunas verdes, es responsable del sabor amargo en los aceites de alta calidad. Además, su concentración varía según la época del año, siendo más alta en hojas recolectadas en primavera.
Recientes investigaciones han analizado los efectos de las infusiones de hoja de olivo en la salud. Un estudio de 2022, que combinó datos de 12 ensayos, mostró que el extracto de hoja de olivo, en dosis de entre 500 mg y 5 g, podría contribuir a reducir factores de riesgo de enfermedades cardíacas y a disminuir la presión arterial en personas hipertensas.
Sin embargo, un estudio más reciente en 2024, que incluyó 703 participantes, utilizó dosis más bajas (entre 250 y 1,000 mg) y no logró encontrar efectos significativos en todos los participantes, aunque si se observaron mejoras en grupos específicos.
Aunque no se pueden asegurar resultados contundentes, la mayoría de los estudios concuerdan en que una suplementación diaria de un gramo no presenta efectos adversos. No obstante, se aconseja precaución, especialmente para mujeres embarazadas o lactantes, dado que no existen datos suficientes que respalden su seguridad durante estas etapas.
Por otro lado, se han reportado casos aislados de agresividad tras el consumo excesivo de hojas de olivo, lo que levanta interrogantes sobre la toxicidad posible de ciertos compuestos en dosis elevadas.
En conclusión, aunque las infusiones de hojas de olivo pueden ofrecer beneficios en pequeñas dosis, es vital no utilizarlas como sustituto de tratamientos médicos. Para quienes deseen incorporarlas en su dieta, hay múltiples formas de hacerlo, ya sea en infusiones, batidos o como parte de ensaladas.