Funcionarios chinos están explorando la posibilidad de vender al menos una porción de la versión estadounidense de TikTok a X, la red social anteriormente conocida como Twitter y ahora en manos de Elon Musk.

Esta noticia, que llega a través de informes de Bloomberg y The Wall Street Journal, indica un giro potencial en la postura del régimen chino, que hasta ahora había rechazado la idea de vender la popular aplicación en un intento por prevenir su prohibición en Estados Unidos.

Actualmente, se prevé la entrada en vigor de una ley que podría restringir el uso de TikTok en tierras estadounidenses. Como estrategia para evitar este escenario, ByteDance —la compañía matriz de TikTok— podría considerar la venta a un propietario estadounidense.

En enero, la Corte Suprema reafirmó su decisión de respaldar la legislación bajo el argumento de la seguridad nacional, lo que llevó a TikTok a criticar la medida como un ataque a la libertad de expresión.

El Ministerio de Comercio de China había mostrado su resistencia ante una venta forzada, aunque los rumores sobre compradores interesados persisten. Ilustres analistas sugieren que esta potencial transacción podría servir a múltiples intereses, creando la más intrigante de las situaciones.

Un análisis de CNN plantea que el interés de Musk, ByteDance y el gobierno chino podría estar fundamentado en razones económicas y estratégicas. ByteDance podría estar buscando obtener beneficios antes de perder el acceso al lucrativo mercado estadounidense. A su vez, Pekín podría interpretar la venta a Musk como una oportunidad para mantener TikTok en manos de un aliado estratégico.

Es importante recordar que las operaciones comerciales de Musk, conocido por ser el hombre más rico del mundo según Forbes, dependen en gran medida del acceso al mercado chino, especialmente con Tesla y sus operaciones en Shanghái.

Además, Musk ha sido co-líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental de la administración de Donald Trump, fortaleciendo la posibilidad de que una colaboración con él tenga implicaciones en negociaciones comerciales con Estados Unidos.

La venta de TikTok a Musk también podría permitirle ampliar su influencia sobre una de las plataformas más poderosas del mundo, que cuenta con unos 170 millones de usuarios mensuales en Estados Unidos. Esta influencia puede ser clave para Musk, quien ha utilizado X para impulsar campañas políticas, aunque ha enfrentado críticas por permitir la desinformación en la plataforma.

El director del programa de tecnologías estratégicas en el Center for Strategic and International Studies (CSIS), James Andrew Lewis, considera que las especulaciones sobre la venta podrían ser tácticas tanto de Musk como de China para sondear reacciones.

Expertos en el área como Dan Ives de Wedbush han estimado que un acuerdo de esta magnitud podría valorarse entre 40.000 y 50.000 millones de dólares, aunque esto presentaría desafíos financieros para Musk.

ByteDance requeriría la aprobación del gobierno chino para materializar cualquier acuerdo relacionado con TikTok en Estados Unidos. Sin embargo, las partes no se han pronunciado oficialmente hasta ahora.

Aunque Elon Musk ha señalado que Taiwán forma parte integral de China, lo que provocó una fuerte respuesta de las autoridades taiwanesas, su relación con China es crucial, considerando que el país constituye el segundo mercado más grande de Tesla.

Finalmente, si se llevara a cabo el acuerdo, parece improbable que China permita la transferencia del algoritmo de TikTok, el 'ADN clave' que impulsa la popularidad de la aplicación, aunque la adquisición podría ser considerada un 'activo de oro' para Musk y su empresa de inteligencia artificial, xAI.