Una situación alarmante se vivió en La Cisterna cuando más de mil personas fueron evacuadas debido a una peligrosa fuga de amoniaco en la planta de la empresa Ariztía. La emergencia química tuvo lugar la noche del martes y afectó a los residentes de la avenida El Parrón.

El aire se mantuvo tóxico durante aproximadamente cinco horas, lo que obligó a las autoridades a evacuar a los vecinos de un amplio perímetro de cuatro cuadras alrededor de la empresa. Esta rápida acción fue crucial para salvaguardar la vida de los ciudadanos, quienes estaban en grave riesgo.

Más de diez unidades de Bomberos, junto con el Cuerpo de Bomberos Metropolitano Sur, acudieron al sitio para manejar la crisis. Según el comandante Alex Alarcón, la fuga se originó a causa de la rotura de una válvula en un estanque que contenía 6 mil metros cúbicos de amoniaco, un compuesto químico altamente tóxico.

Además, la capitán de Carabineros, Bárbara Villouta, informó que varios trabajadores de la empresa fueron trasladados a la Asociación Chilena de Seguridad debido a complicaciones de salud vinculadas con la exposición al amoniaco. Este tipo de situaciones subraya la importancia de tener protocolos de seguridad claros y eficaces en instalaciones industriales.

Por su parte, el alcalde de La Cisterna, Joel Olmos, anunció que se están evaluando acciones legales contra Ariztía por este incidente, lo que podría llevar a sanciones severas. La comunidad se encuentra en estado de alerta y muchos se preguntan qué medidas se implementarán para prevenir futuros accidentes similares.

Este evento ha puesto de nuevo en el centro de la discusión la seguridad de las instalaciones industriales en áreas residenciales, y la urgencia de contar con regulaciones más estrictas que protejan a los ciudadanos.