En un giro esperanzador, tres personas, entre ellas una mujer embarazada y un niño de cinco años, han sido rescatadas sanas y salvas por equipos de emergencia enviados desde China a la ciudad de Mandalay, Birmania. Esta localidad se encuentra a tan solo 20 kilómetros del epicentro de un devastador terremoto de magnitud 7.7 en la escala de Richter, que azotó el país el pasado viernes, dejando un saldo trágico de al menos 1,700 muertos, según las cifras oficiales más recientes.

La Embajada china en Birmania confirmó que los rescatistas realizaron estas operaciones heroicas “tras una noche en vela de lucha continua” entre los escombros del Sky Apartment y el Great Wall Hotel. De los rescates, se destaca a una mujer embarazada, una mujer de 29 años y al niño de cinco, quienes fueron rapidamente enviados a un hospital cercano para recibir atención médica.

Horasy antes, el equipo de rescate había logrado salvar a otra mujer entre los restos del Great Wall Hotel, lo que añade a la esperanza en medio de este desastre devastador. El equipo chino, que llegó a la región el domingo, sigue llevando a cabo operaciones de búsqueda en la zona, mientras las noticias sobre posibles nuevos supervivientes continúan siendo inciertas.

En respuesta a esta calamidad, la junta militar que gobierna Birmania desde el golpe de estado en febrero de 2021 ha declarado un luto nacional de siete días para honrar a las más de 1,700 víctimas fatales del terremoto. La tragedia ha sacudido profundamente al país, generando una ola de solidaridad y apoyo internacional en un momento de crisis.

Mientras tanto, se urging a la comunidad internacional a unirse en esfuerzos de asistencia humanitaria para ayudar a las afectadas por el sismo y a quienes han perdido todo. La situación sigue siendo crítica, y la esperanza de encontrar más sobrevivientes está presente en el corazón de todos los involucrados en las peligrosas labores de rescate.