Marisela Santibáñez, conocida actriz y ex-representante del Partido Comunista, ahora independiente, se abrió sobre su experiencia en la política en una reciente entrevista con Pamela Díaz en el programa 'Sin editar'. Desde su elección como diputada en 2018, ha enfrentado una montaña rusa de emociones y desafíos.

La diputada tocó temas profundos y personales, compartiendo cómo la pérdida de un hijo ha transformado su perspectiva: 'Después de que se te muere un hijo es súper difícil tener miedo'. Esta sinceridad dio lugar a una conversación honesta sobre el verdadero miedo en el ámbito político: 'No me genera mayor miedo hacer algo mal, porque puedo decir que no debo un peso. No soy alguien que vino a enriquecerse', enfatizó.

Uno de los momentos más sorprendentes de la entrevista fue cuando Santibáñez elogió a un colega de la UDI, el diputado Guillermo Ramírez. Al respecto, dijo: 'Le mando un beso y es mi amigo'. Este comentario puso de relieve la importancia del compañerismo en la política, incluso entre opositores. Santibáñez destacó que, a pesar de sus diferencias políticas, Ramírez es un buen ejemplo de alguien que estudió en Harvard y ahora está comprometido con su labor en el Congreso, recibiendo una dieta parlamentaria que ella considera insuficiente para sus antecedentes académicos.

Ramírez, quien lleva dos periodos en el Congreso, agregó a la conversación un enfoque interesante sobre la profesionalización de la política en Chile, una discusión que sigue siendo relevante en el contexto actual del país.

Mirando hacia el futuro, Santibáñez admitió que podría estar en su último periodo como diputada, ya que se está planteando su reelección para fines de 2025. Sin embargo, dejó claro que su deseo es continuar sirviendo a la comunidad, ya sea dentro o fuera del Parlamento. Esta postura abierta y honesta sobre su futuro y su rol en la política podría resonar con muchos chilenos que buscan una representación auténtica y libre de intereses personales.

Con estos comentarios, Santibáñez se convierte en un punto de referencia en la nueva política chilena, donde la conexión humana y el compromiso social son cada vez más valorados.