La Universidad de La Frontera (UFRO) ha salido al paso de las acusaciones sobre pagos extras a sus académicos, explicando que los altos sueldos percibidos son el resultado de asignaciones de proyectos financiados por otras instituciones, no de sobresueldos.

El vicerrector académico, Renato Hunter, aclaró que el sueldo bruto de algunos profesores puede alcanzar hasta $17 millones, pero este monto incluye cerca de $12 millones que provienen de recursos externos, lo que deja claro que no se trata de pagos adicionales no justificados. Esta información está disponible en la plataforma 'Transparencia Activa', donde se detallan los sueldos brutos, líquidos y adicionales de los académicos que tienen remuneraciones variables.

Sin embargo, la situación financiera de la UFRO es crítica, con un déficit que ya asciende a los $18 mil millones. Para hacer frente a esta crisis, la universidad ha diseñado un plan de reajuste que busca reducir sus gastos en casi $17 mil millones para el 2025, lo que podría implicar despidos en la institución, una preocupación que ya ha comenzado a generar incertidumbre entre la comunidad educativa.

Además, UFRO se encuentra con su acreditación vigente hasta el 24 de noviembre de este año, y el vicerrector ha señalado que los resultados de su informe de acreditación se darán a conocer en junio de 2025. Esta acreditación es crucial, ya que mantiene los beneficios estudiantiles, pero el clima de inestabilidad en la universidad ha levantado muchas dudas entre estudiantes y académicos sobre el futuro de la institución.

Hasta ahora, ya se han registrado despidos significativos, incluyendo al director de recursos humanos, el director de finanzas y la directora de la Dirección de Análisis. Las revelaciones sobre la crisis financiera y la posibilidad de desvinculaciones masivas han sembrado la preocupación entre quienes laboran y estudian en la UFRO, una de las universidades más importantes de La Araucanía.