Ciencia

La Computación Cuántica: ¿Qué es, para qué sirve y por qué es crucial para el futuro?

2025-03-28

Autor: Pedro

Aunque no todos lo saben, algo tan cotidiano como ir a un restaurante muestra las variaciones en el sector tecnológico. Al sentarse, alguien utiliza su teléfono móvil para escanear un código QR y acceder al menú. Sin embargo, hace unos años esta tecnología era vista como innecesaria. La pandemia transformó esa percepción al hacer evidente su utilidad. De manera similar, la computación cuántica se encuentra en un camino parecido como una promesa tecnológica que debe ofrecer soluciones efectivas. Pero muchos aún cuestionan la necesidad de esta revolución tecnológica.

Elena Yndurain, profesora del IE y del UC3M, ejecutiva de Microsoft y columnista de Actualidad Económica, ha abordado esta falta de comprensión en su nuevo libro, "Quantum Computing Strategy: Foundations and Applicability", presentado recientemente en la Residencia de Estudiantes en el CSIC. En su charla, destacó que muchas empresas enfrentan dudas sobre la computación cuántica, especialmente entre las personas encargadas de tomar decisiones, quienes a menudo no comprenden sus fundamentos físicos y se sienten intimidadas por estos conceptos complejos. Aunque han oído hablar de la computación cuántica, hay un abismo de entendimiento entre los expertos técnicos y los líderes empresariales.

"Entender que la computación cuántica es contraintuitiva es fundamental", comentó Yndurain. Para facilitar la comprensión, utilizó analogías y ejemplos de diferentes industrias; su libro incluye casos prácticos de 11 sectores donde se aplica o podría aplicarse la computación cuántica, como la salud, las finanzas y el transporte. Estas ilustraciones ayudan a transformar un concepto abstracto en aplicaciones reales y palpables.

Sin embargo, Yndurain también abordó los riesgos asociados con esta tecnología, en particular en el ámbito de la ciberseguridad. Aseguró que los ordenadores cuánticos pueden vulnerar la criptografía actual, que protege la información sensible. Mientras que un superordenador podría tardar años en descifrar ciertos códigos, un ordenador cuántico podría hacerlo en cuestión de días o incluso horas. Esto plantea la necesidad urgente de desarrollar nuevas técnicas de encriptación capaces de resistir estos ataques.

"Es crucial comprender cómo funciona un ordenador cuántico", reiteró Yndurain, enfatizando que no es una solución mágica para todos los problemas. Entre sus capacidades, la computación cuántica puede mejorar el análisis de riesgos y la simulación de procesos químicos. Por ejemplo, podría optimizar el sistema eléctrico al gestionar eficientemente las cargas variacionales de electrodomésticos, lo que es esencial en situaciones donde la solvencia energética es crítica, como durante la noche.

Todavía persiste la incertidumbre sobre cuándo la computación cuántica estará verdaderamente disponible. "Una de las preguntas más frecuentes es cuántas etapas debe pasar esta tecnología para que esté lista para el uso", ponderó la autora. A medida que la tecnología avanza, también es necesario educar a las empresas sobre sus posibles aplicaciones, algo que Yndurain enfatizó tras la proclamación de la supremacía cuántica por parte de Google, que, aunque notable, es solo un primer paso en un camino lleno de desafíos.

Escolástico Sánchez, responsable de Quantum en BBVA, sintetizó la situación con humor al decir: "No sé mucho de mecánica cuántica, pero entiendo de problemas". Esto resalta el potencial de la computación cuántica para resolver complejos problemas empresariales, ofreciendo a las organizaciones una ventaja competitiva si son capaces de aprovechar sus capacidades.

El libro de Yndurain tiene una doble función: no solo educar sobre esta revolución tecnológica, sino también motivar a las empresas a invertir en su desarrollo. Ricardo Enríquez, un académico en el ámbito de las ciencias físicas, también expresó su entusiasmo por el libro, resaltando la importancia de que estas discusiones lleguen a tiempo y subrayando que la cuántica representa una promesa valiosa en la que vale la pena creer. La computación cuántica podría cambiar radicalmente la forma en que operan diversas industrias, desde la medicina hasta la inteligencia artificial, y está claro que el momento de empezar a explorar su potencial es ahora.