Boca Juniors sufrió una contundente derrota por 2-0 ante Newell's Old Boys, lo que ha desatado una nueva ola de críticas hacia las decisiones tácticas de Fernando Gago. La semana estuvo marcada por la controversia en torno a Carlos Palacios, quien se ausentó de un entrenamiento, lo que llevó al director técnico a excluirlo de la convocatoria para el partido del domingo. Tras el encuentro, Gago se refirió a la situación del jugador chileno y justificó su decisión: “Esto es muy claro. Aquí hay normas desde principio de año que los jugadores conocen perfectamente. Carlos faltó a un entrenamiento, los motivos quedan puertas adentro y decidí no convocarlo por una razón que ya hemos hablado previamente.”

En cuanto al desempeño del equipo, Gago no tuvo dudas en calificar la actuación como muy mala: “No lo tomo como un retroceso de cinco casilleros, es un partido muy malo. Ni antes éramos tan buenos ni ahora tan malos. Jugamos mal, no tuvimos el juego ni los duelos ganados, y hubo situaciones donde no estuvimos finos. No hay que darle más vueltas: no me voy preocupado, simplemente jugamos mal.”

El técnico agregó que es necesario seguir trabajando para recuperar el buen nivel de juego que habían mostrado: “Todas las facetas del juego son para mejorar”. Gago también se detuvo a analizar detalles del encuentro, reconociendo errores tanto individuales como colectivos: “La jugada del primer gol fue un doble error de situación. Cometimos fallas que nos costaron el partido. Creo que también fue una cuestión de no poder encontrar la fase de ataque adecuada.”

Además, Gago expresó su preocupación por la falta de orden en su equipo al intentar buscar el empate: “Era una situación donde teníamos que tratar de atacar, de encontrar esos espacios para generar oportunidad. La única solución era por fuera, y creímos que el partido podría desarrollarse así en los minutos finales. Falta fluidez para encontrar situaciones.”

Con esta derrota, se espera que Boca Juniors replantee su estrategia para el venidero partido contra Rosario Central, donde se juega no solo los puntos, sino también el orgullo ante su hinchada. ¿Logrará Gago revertir la situación o la presión sobre su gestión seguirá aumentando? La respuesta, este fin de semana.