El 7 de marzo, un video desgarrador se volvió viral en las redes sociales, mostrando la angustia de un padre que denunció a una peluquería de Quilpué, en la región de Valparaíso. Su hija de 23 años terminó con quemaduras de tercer grado en el cuero cabelludo luego de un doloroso procedimiento de decoloración conocido como ‘babylights’.

El hombre, sujetando un mechón de cabello de su hija, clamaba por ayuda mientras relataba que el personal del centro de estética en el mall de Quilpué no respondía a sus llamados, ni se hacía cargo de los daños ocasionados por el mal procedimiento. "El dueño no quiere conversar, no quiere dar la cara. Esto es el resultado de un trabajo que le hicieron aquí", se le escucha decir.

Según la joven afectada, el día del incidente, en su intento por cambiar su look, fue sometida a un tratamiento de decoloración utilizando una máquina llamada 'Climazol', que se emplea para acelerar este proceso. Ella describió el momento de la aplicación: "Comencé a sentir un dolor intenso en mi cabeza y pedí a las peluqueras que me retiraran los papeles inmediatamente. Me asusté".

Tras el tratamiento, la joven tuvo que acudir a urgencias por la severidad de la quemadura, que afectó incluso el tejido nervioso y los folículos pilosos. Debido a la gravedad de la situación, actualmente se encuentra bajo tratamiento con antibióticos para combatir una infección y ha sido referida a un cirujano por la posible pérdida total de cabello en esa área.

La experta en estética capilar, Constanza Lucero, explicó que la quemadura se debió a un mal procedimiento de decoloración. "Al envolver completamente la cabeza y aplicar el decolorante, si se utiliza una máquina como el Climasol, el calor puede provocar que el producto alcance temperaturas peligrosas, generando quemaduras en el cuero cabelludo".

Lucero también señaló que hay varios factores que pueden llevar a este tipo de accidentes; entre ellos, un diagnóstico erróneo del tipo de cabello antes del tratamiento. Si el cabello había sido tratado previamente con productos que contienen formaldehído, esto podría haber provocado una reacción química peligrosa.

Ante esta traumática experiencia, la familia de la víctima ha decidido tomar acciones legales contra la peluquería 'Nova Vitta'. Tras una reunión programada con Luis Rosales, el encargado del salón, la madre de la joven advirtió que de no llegar a un acuerdo, emprenderán un proceso legal y presentarán un reclamo ante el Servicio Nacional del Consumidor.

Este caso pone de relieve la necesidad de mayor regulación y control en la industria de la estética, así como la importancia de contar con profesionales capacitados y equipamiento adecuado para evitar tragedias similares en el futuro. La comunidad sigue atenta a la evolución de este caso, que ha abierto un debate sobre la seguridad en los procedimientos de belleza.