La reciente desaparición del hielo en la isla Snow ha revelado la existencia de diversas islas en el extremo norte de la Península Antártica. Este descubrimiento ha sido corroborado por la Sociedad Geográfica Española (SGE), que ha documentado la última expedición a la isla conocida oficialmente como Isla de Cacho, un homenaje al destacado científico español, Javier Cacho.

El 7 de febrero de 2024, la expedición liderada por Cacho logró llegar a este remoto lugar, que fue nombrado en su honor por el Comité Científico para la Investigación en la Antártida (Scientific Committee on Antarctic Research) en 2020. Este acontecimiento marcó un hito, ya que es la primera isla en la Antártida que lleva el apellido de un científico español, reconociendo así su valentía y contribuciones al estudio del continente helado, propuestas inicialmente por el Instituto Antártico Búlgaro.

Javier Cacho Gómez, nacido en Madrid en 1952, no solo es un experto en la Antártida, sino también un renombrado investigador de la química atmosférica y la capa de ozono, autor de más de diez libros que abordan la historia y características de este continente. Su labor incluye ser parte de la primera expedición científica española a la Antártida en 1986-87 y dirigir la Base Antártica Juan Carlos I durante tres campañas.

Un sello con historia

Además, la Isla de Cacho cuenta ahora con un sello oficial de Correos, diseñado gracias a la iniciativa del médico argentino Carlos Court. Court, afincado en España y gran aficionado a la filatelia, propuso la creación de este sello conmemorativo al Servicio Filatélico de Correos, considerándolo un hito significativo para la historia.

El evento de presentación de este sello se llevará a cabo el próximo 12 de noviembre en el Instituto Geográfico Nacional y contará con la participación de figuras destacadas como Juan Ignacio Entrecanales y Nuria Lera. Durante la ceremonia, se realizará un matasellado de honor, celebrando este reconocimiento a la entrada de Cacho en la historia postal de España.

Momentos memorables en la Isla de Cacho

La historia detrás del nombre de esta isla es particularmente significativa para Javier Cacho. Hasta este ano, Cacho no había tenido la oportunidad de pisar la isla que ahora lleva su nombre, aunque había estado cerca en sus anteriores viajes. Fue gracias a una buena relación con científicos búlgaros que se organizó un viaje donde, durante un cruce por la costa antártica, se pudo realizar un breve desembarco.

"El desembarco fue mágico. A pesar de la oscuridad y del peligro del mar, tuve la oportunidad de plantar la bandera de España en una isla que representa tanto para mí. Fue un sueño cumplido no solo para mí, sino para todo el equipo que me acompañaba", compartió Cacho con emoción.

La Isla de Cacho representa no solo un homenaje a un destacado científico, sino también un símbolo de la colaboración internacional en la investigación antártica y un recordatorio de la continua importancia de la preservación del medio ambiente en el continente helado, especialmente en el contexto del cambio climático actual. El legado de Javier Cacho continúa inspirando a futuros investigadores y promoviendo la ciencia en la Antártida.