Ciencia

¡Inesperado! Darío Gil, el ingeniero español que Trump elige para transformar la ciencia en EE.UU.

2025-01-20

Autor: Lucas

En una sorprendente decisión, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha nombrado al ingeniero español Darío Gil, originario de Murcia y con 49 años, como el nuevo subsecretario de Ciencia e Innovación del Departamento de Energía. Desde este importante cargo, Gil tendrá la responsabilidad de supervisar e impulsar la investigación básica en áreas punteras como la inteligencia artificial, la computación cuántica y las energías nuclear, fósil y renovable.

Trump expresó su confianza en Gil el 16 de enero a través de su red social Truth, calificándolo como un "empresario y científico brillante". Antes de este nombramiento, Gil fue director mundial del área de investigación en IBM, donde dejó su huella en proyectos de vanguardia. En una reveladora visita a la Casa Blanca en noviembre de 2021, junto al neurocientífico Rafael Yuste, advirtió sobre la inminente llegada de un mundo donde las personas podrían conectar sus cerebros a Internet mediante dispositivos capaces de leer pensamientos.

En una entrevista concedida a EL PAÍS hace tres años, Gil describió visiones futuristas sobre la interconexión entre la humanidad y sistemas de computación avanzados: "La combinación de una capacidad de computación hiperacelerada con el cerebro humano podría dar lugar a una explosión de capacidades. Esto no solo implicaría avances en inteligencia artificial, sino también un aumento en el conocimiento y la comprensión de procesos físicos y lingüísticos".

Con un doctorado en ingeniería eléctrica y ciencia computacional del prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts, Gil ha sido pionero en el desarrollo de nuevas estrategias en inteligencia artificial y computación cuántica. Además, es miembro de la Academia Nacional de Ingeniería de EE.UU. y ha formado parte del consejo de asesores de ciencia y tecnología de Trump durante su primer mandato.

Lo que más sorprende es que, a pesar de las implicaciones éticas, Gil cree firmemente que leer pensamientos será común en un futuro cercano. Él contempla enfoques positivos de la neurotecnología, especialmente en su uso para ayudar a personas con discapacidades. Sin embargo, también advierte sobre la necesidad de regulación y discusión sobre el uso potencialmente negativo de estas tecnologías: "Debemos estar alerta ante el riesgo de violaciones a la libertad de expresión y conciencia. Las aplicaciones de esta tecnología podrían llevar a situaciones peligrosas, especialmente en países donde los derechos humanos no están protegidos".

Con este nuevo rol, Gil no solo tendrá una gran influencia en el futuro de la ciencia en EE.UU., sino que también se enfrenta al reto de asegurar que las tecnologías emergentes se utilicen de manera ética y responsable. La comunidad científica estará mirando de cerca cómo se desarrollarán estas iniciativas bajo su liderazgo en el gobierno.