Un vuelo de la aerolínea escandinava SAS, que partió de Oslo (Noruega) con destino a Málaga (España), tuvo que aterrizar de manera inesperada en Copenhague, Dinamarca, tras el sorprendente descubrimiento de una rata en la comida de un pasajero. Este curioso episodio llamaría la atención de cualquiera, y así lo confirmó un portavoz de la aerolínea el pasado viernes.

El insólito incidente ocurrió el miércoles, cuando los viajeros notaron la presencia del pequeño roedor a bordo. La tripulación tomó la decisión de desviar el avión para llevar a cabo una inspección minuciosa, cumpliendo así con los protocolos de seguridad que tiene establecidos la aerolínea. La seguridad de los pasajeros es la prioridad en estas situaciones, y SAS actuó rápida y eficientemente.

Øystein Schmidt, vocero de SAS en Noruega, manifestó a la agencia AFP que la tripulación actuó siguiendo las normativas internas de la empresa. "Hubo un cambio de avión para una inspección", afirmó. También subrayó que este tipo de situaciones suceden “con muy poca frecuencia”, lo cual tranquiliza a los viajeros frecuentes de la aerolínea.

Rata en comida de un vuelo

A pesar del revuelo que pudo causar el incidente, los pasajeros tomaron todo con humor y no mostraron grandes preocupaciones. Uno de los viajeros, Jarle Børrestad, compartió su experiencia en redes sociales: "Lo crean o no, una señora sentada a mi lado (...) abrió su comida y un ratón apareció de un salto", publicó junto a una imagen donde aparece sonriente con dos mujeres.

Tras la revisión correspondiente y el cambio de aeronave, los pasajeros pudieron continuar su viaje a Málaga sin más contratiempos. Además, Schmidt aseguró que la aerolínea ha implementado rigurosos protocolos para manejar incidentes de esta naturaleza, y que se llevará a cabo una auditoría con los proveedores de alimentos para prevenir que hechos similares puedan repetirse en el futuro.

Este extraño suceso no solo genera risas, sino que abre un debate sobre la importancia de la higiene y la seguridad alimentaria en los vuelos. Si bien fue una anécdota curiosa para muchos, los viajeros esperan que estas situaciones se mantengan en el ámbito de la comicidad y no se conviertan en un problema recurrente en la aviación.