En un giro inesperado de los acontecimientos, la pareja española, Jon Sanz y Coki Nieto, logró una remontada asombrosa para vencer en la final del Masters de Barcelona a la pareja hispano-argentina número uno del mundo, Agustín Tapia y Arturo Coello, con un marcador de 6-3, 5-7, 3-6. Este triunfo marcó su segundo título de la temporada, provocando una conmoción en el mundo del pádel.

Con esta victoria, Sanz y Nieto han roto una racha impresionante de 47 victorias y 168 días sin perder de sus rivales, quienes no sabían lo que era perder desde la final del Primer Padel de Ginebra, celebrada el 7 de julio de 2024. Esta histórica derrota ha dejado a todos boquiabiertos, dado que Tapia y Coello han sido considerados imbatibles durante la presente temporada, habiendo conquistado catorce títulos Premier Padel.

El partido comenzó con una intensidad trepidante. Aunque los favoritos, Tapia y Coello, comenzaron dominando con potentes remates, Sanz y Nieto demostraron su resiliencia. A pesar de no ser cabezas de serie, mantuvieron la calma y ganaron inicialmente sus dos primeros saques, igualando el marcador a 2-2.

Sin embargo, en el sexto juego, la dupla líder logró el primer break, consolidándolo luego y llevando el marcador a 5-2. La combinación de su estrategia feroz y habilidad en la pista permitió a Tapia y Coello cerrar el primer set con un decisivo 6-3.

En el segundo set, la historia parecía repetirse cuando Tapia y Coello rompieron el servicio desde el primer juego. Con un 2-0 a su favor, lucían imbatibles. Pero Nieto y Sanz no se rindieron, adoptando una agresiva estrategia contra la estrella argentina, haciendo todo lo posible por poner presión en los puntos clave.

En un momento espectacular, lograron hacer un break a los número uno del mundo, un hecho sin precedentes durante el torneo. Este hito llevó el segundo set a un emocionante 5-5, desatando una ola de euforia entre los espectadores en el Palau Sant Jordi.

Impulsados por el apoyo del público, Sanz y Nieto rompieron nuevamente el servicio de sus oponentes y lograron hacerse con el segundo set 7-5, desatando una celebración notable y asegurando un empate en sets.

El decisivo tercer set vio a la pareja española jugando con una energía desbordante. Sanz, en particular, deslumbró con algunos golpes imposibles, marcando un 2-3. Con el viento a favor, una segunda ruptura del servicio de los rivales colocó el marcador en 2-5, y Sanz y Nieto estaban listos para sellar la victoria.

Con el servicio a su favor para ganar el partido, Sanz y Nieto no dudaron y concluyeron de manera espectacular, marcando un histórico 6-3, 5-7, 3-6. Este triunfo no solo les otorga un nuevo trofeo, sino que también establece que en el pádel, las sorpresas son siempre una posibilidad, y que la grandeza puede venir de cualquier rincón del ranking.