El grupo chino Huaneng ha marcado un nuevo hito en la industria del almacenamiento de energía al poner en marcha la segunda fase de su innovador proyecto de almacenamiento de energía por aire comprimido (CAES) en la cueva de sal de Jintan, localizada en Changzhou, en la provincia de Jiangsu.

Este proyecto no solo representa un avance monumental para el almacenamiento de energía sostenible, sino que también establece nuevos parámetros en eficiencia y producción energética. Con la incorporación de dos unidades adicionales de CAES, cada una con una capacidad de 350 MW, la instalación podrá almacenar hasta 2,8 GWh de electricidad por carga completa, consolidándose como la mayor del mundo en su categoría.

Pero eso no es todo. Este ambicioso proyecto se ha diseñado para minimizar costos y emisiones. Al implementar energías renovables y optimizar procesos logísticos, Huaneng busca reducir la huella de carbono de su operación. A su vez, la tecnología mejora la eficiencia del sistema, logrando una conversión energética superior al 60% sin emisión de dióxido de carbono, algo crucial en el contexto actual de cambio climático.

La fase dos del proyecto también destaca por su capacidad de puesta en marcha rápida; ahora, los equipos pueden estar operativos en solo 5 minutos, un avance significativo respecto a los anteriores 20 minutos. Esto se debe a un innovador sistema de arranque con un solo clic, que también contribuye a estabilizar la red eléctrica a través de una turbina neumática que amplifica la eficiencia operativa en un 0,5% adicional.

Además, se estima que la implementación de esta tecnología de almacenamiento de energía por aire comprimido podría abrir las puertas a más de 20 proyectos similares en el futuro, consolidando a China como líder mundial en almacenamiento de energía. Huaneng no solo está revolucionando la infraestructura energética del país, sino que está ofreciendo un modelo escalable que podría ser replicado en cualquier parte del mundo, especialmente en regiones que buscan soluciones limosas y libres de carbono ante la creciente demanda energética.

Este proyecto pionero es un claro ejemplo de cómo los sistemas de energía sostenibles pueden abordar la intermitencia de las fuentes renovables, que a menudo representan un desafío para la estabilidad del suministro eléctrico. La industria está observando de cerca este desarrollo, ya que podría inspirar la adopción de nuevas tecnologías de almacenamiento de energía en múltiples sectores.

En un momento en que la necesidad de soluciones energéticas eficientes y sostenibles no podría ser más urgente, el proyecto CAES de Jintan se erige como un faro de esperanza. La industria energética está en una encrucijada, y proyectos como este parecen indicar que el futuro podría ser más brillante, y ecológico, de lo que jamás imaginamos.