Los agujeros negros, esos misteriosos y aterradores fenómenos del cosmos, han mantenido a la humanidad fascinado durante décadas. En 2024, la investigación sobre estos colosos del universo dio un giro sorprendente, ofreciendo descubrimientos que no solo reescribieron la astronomía, sino que también transformaron nuestra comprensión del cosmos. A continuación, exploramos los hallazgos más impactantes del año.

1. Un agujero negro de masa intermedia en el centro de la Vía Láctea

Este año se identificó un posible agujero negro de masa intermedia en el cúmulo estelar IRS 13, situado a solo una décima de año luz de Sagitario A*, el supermasivo en el corazón de nuestra galaxia. Si se confirma su existencia, este hallazgo podría proporcionar pistas sobre cómo los agujeros negros pequeños se convierten en gigantescos supermasivos.

2. LID-568: Un devorador de materia a velocidad sorprendente

El telescopio James Webb reveló un agujero negro supermasivo llamado LID-568 que consume materia 40 veces más rápido de lo que se consideraba posible. Este agujero negro existió apenas 1,500 millones de años después del Big Bang, lo que plantea preguntas sobre la formación de agujeros negros en el universo primitivo.

3. Nuevas teorías sobre agujeros negros primordiales

Una innovadora hipótesis sugiere que los agujeros negros primordiales podrían no haber surgido de estrellas colapsadas, sino de densos colapsos de gas en el universo temprano. Esto podría explicar la rápida formación de algunos de los agujeros negros más poderosos que conocemos hoy.

4. Agujeros negros diminutos: ¿fantasmas en el universo?

Se plantea la inquietante idea de que agujeros negros minúsculos podrían estar atravesando el cosmos y, tal vez, incluso nuestro propio cuerpo. Si estos “fantasmas” son reales, podrían ofrecer respuestas sobre la misteriosa materia oscura que compone gran parte del universo.

5. Chorros de agujeros negros que desafían la distancia

Investigaciones recientes revelaron los jets más largos jamás registrados, denominados Porfiriòn, que se extienden a 23 millones de años luz. Este descubrimiento podría cambiar la manera en que entendemos cómo estos jets impactan el medio intergaláctico.

6. Explosiones estelares provocadas por agujeros negros

Los astrónomos observaron por primera vez cómo los jets de un agujero negro desencadenan explosiones estelares, conocidas como novas. Aunque no impactan directamente a las estrellas, parece que influyen en su entorno, generando eventos violentos y misteriosos.

7. El “latido” de los agujeros negros, explicado

Al alimentarse, los agujeros negros emiten llamaradas de rayos X que pueden durar millones de años. Este año, se detectaron pulsos regulares dentro de estas llamaradas, lo que sugiere que podrían ser causados por ondas de choque en la materia que los agujeros negros consumen.

8. Sagitario A* y su intrigante rotación

El agujero negro de nuestra galaxia, Sagitario A*, presenta una rotación inusualmente rápida y desalineada. Este comportamiento podría surgir de colisiones masivas entre agujeros negros en el pasado, lo que ofrece nuevas preguntas sobre la dinámica galáctica.

9. El primer sistema triple de agujeros negros

Tradicionalmente, los agujeros negros se encuentran en sistemas binarios, pero este año, un sistema único fue descubierto, donde un agujero negro orbita junto a dos estrellas. Este hallazgo refuerza la idea de que algunos agujeros negros pueden tener orígenes diferentes a los convencionales.

10. Un agujero negro “dormido” que vuelve a la vida

Por primera vez, los científicos observan cómo un agujero negro que había estado inactivo finalmente reanuda su actividad al capturar nueva materia. Este fenómeno sirve como una ventana rara para estudiar cómo cambian los agujeros negros su comportamiento a lo largo del tiempo.

Estos descubrimientos no solo son emocionantes, sino que también nos llevan a replantear lo que sabemos sobre el universo y el lugar que ocupamos en él. ¡El futuro de la astronomía nunca ha sido tan prometedor!