El alarmante deshielo y la drástica reducción de la nieve, provocados por el cambio climático, han descubierto un ecosistema entero fosilizado que estuvo escondido durante 280 millones de años en los majestuosos Alpes italianos. Este asombroso hallazgo se está exhibiendo desde este miércoles en el Museo de Historia Natural de Milán, donde se espera que atraiga a numerosos curiosos y científicos por igual.

Los fósiles encontrados ofrecen “increíbles rastros de vida y naturaleza prehistórica”, incluyendo huellas de al menos cinco especies de animales diferentes, como reptiles, anfibios e insectos. Los investigadores han encontrado marcas de largos dedos y estelas de colas en movimiento, detalles que amplían nuestra comprensión sobre el mundo antiguo en el que estos seres habitaban.

Este descubrimiento comenzó cuando una alpinista avistó una huella y alertó a un experto. Desde 2023, un equipo de dedicados investigadores ha estado fotografiando y mapeando cientos de estas huellas a una asombrosa altitud de casi 3,000 metros.

Lorenzo Marchetti, uno de los paleontólogos que ha estado involucrado en el proyecto, comentó que “la conservación de detalles es impresionante”, señalando las huellas distintivas de las yemas de los dedos y la textura de la piel del vientre de algunos de estos animales.

Con estas huellas, los científicos podrán reconstruir con mayor precisión las rutas que estos animales tomaban durante el Pérmico, el último período de la Edad Paleozoica. Es fascinante saber que en ese entonces los dinosaurios aún no existían. Sin embargo, las huellas más grandes encontradas sugieren que algunos de los seres que allí vivieron medían entre 2 y 3 metros de largo.

Además de huellas de animales, se han descubierto marcas de agua, como ondulaciones de olas en las orillas de antiguos lagos y gotas de lluvia que cayeron sobre el barro antes de que se convirtiera en piedra. Estos hallazgos son significativos en el Parque Regional de Orobie Valtellinesi, en la provincia de Bérgamo, al norte de Italia.

Los científicos subrayan que estos fósiles son testigos de un período geológico lejano que presenta una tendencia al calentamiento global similar a la de hoy, aunque en ese tiempo el calentamiento fue causado por gigantescas erupciones volcánicas y el deshielo de casquetes polares, lo que llevó al desarrollo de ambientes tropicales y ocasionó la extinción de muchos seres vivos.

Este hallazgo sirve como un potente recordatorio de que el pasado tiene mucho que enseñarnos sobre las consecuencias de nuestras acciones en el presente. ¿Qué más secretos encerrarán los glaciares a medida que continúen retrocediendo? Este descubrimiento no solo enriquece nuestra comprensión del pasado, sino que también nos invita a reflexionar sobre el futuro de nuestro planeta en el contexto del cambio climático.