Una corte de Pensilvania (EEUU) ha condenado a Anjela Borisova Urumova a ir a la cárcel por haber mentido en un testimonio contra un hombre en 2024, a quien acusó falsamente de violación.

Según informa la revista People, Urumova deberá cumplir inicialmente 45 días en prisión, aunque esta pena podría extenderse hasta 23 meses, dependiendo de la evaluación de su conducta y otros factores.

Además, tendrá que pagar una indemnización de 3.600 dólares (aproximadamente 3.4 millones de pesos) a Daniel Pierson, quien fue acusado injustamente. Es importante destacar que Pierson pasó 31 días en la cárcel debido a estas acusaciones infundadas.

La denuncia falsa de Urumova afirmaba que Pierson la había abordado en la salida de un supermercado en Middletown Township y que luego la había llevado a su auto para cometer el crimen. Sin embargo, tras una investigación, la policía encontró varias inconsistencias en su relato y no se hallaron pruebas concluyentes en las cámaras de seguridad del lugar.

Después de varios interrogatorios, Urumova finalmente confesó que había mentido. Esto condujo a la liberación de Pierson, mientras que Urumova quedó bajo libertad condicional. Solo dos semanas después, el hombre, que ahora es un verdadero víctima de calumnias, la denunció por injurias graves ante un tribunal.

La fiscal del caso, Jennifer Schorn, comentó: “Esta denuncia falsa no solo afectó de manera inimaginable a la víctima y a su familia, sino que también tuvo un profundo efecto en la confianza de la comunidad en el sistema judicial. Un delito como este puede socavar la confianza de la comunidad en el sistema y poner en peligro el procesamiento de delitos legítimos de violencia sexual.”

Por el momento, Urumova deberá someterse a una evaluación de salud mental en un año y cumplirá con 12 meses de libertad condicional. Este caso ha reavivado el debate sobre las denuncias falsas y su impacto en las verdaderas víctimas de delitos sexuales, y muchos se preguntan cómo puedo afectar la percepción pública hacia las denuncias legítimas.

La comunidad está en shock ante esta situación, y expertos advierten que incidentes como este pueden tener repercusiones a largo plazo, no solo para el hombre afectado, sino también para el sistema judicial, que debe lidiar con el escepticismo de quienes verdaderamente han sufrido agresiones.